Toshiba perdió 532.500 millones de yenes (4.537 millones de euros) en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal, lo que supone un resultado un 11% peor que el registrado en el mismo periodo del ejercicio anterior, según las cuentas sin auditar que publicó tras dos aplazamientos el conglomerado industrial japonés, que ha reconocido las "dudas sustanciales" sobre su viabilidad futura. Entre abril y diciembre de 2016, la multinacional registró pérdidas operativas por importe de 576.280 millones de yenes (4.910 millones de euros), lo que supone agravar un 148% sus números rojos en el mismo periodo del ejercicio precedente.

Toshiba, que presentó sus cuentas sin contar con el aval de su auditor, la firma PricewaterhouseCoopers Aarata, reconoce sus dificultades para continuar. A 31 de diciembre su patrimonio consolidado atribuible a los accionistas es de -225.700 millones de yenes (1.922 millones de euros).