La oposición no ha concedido su apoyo al Gobierno local para la reprogramación de los plazos y las obras del Plan Arume y ahora están en riesgo los 2,4 millones de euros procedentes de los fondos europeos, así como los 800.000 euros pendientes de la firma de un nuevo convenio con la Diputación para la Casa da Cultura.

Con once votos en contra y diez a favor se rechazó la propuesta de eliminar los proyectos de recuperación de la senda fluvial del río Mero y de instalación de una red wifi municipal para poder aumentar la financiación de la Casa da Cultura -en 400.000 euros-, la regeneración del campo de la feria -en 54.548 euros- y la pista de skate -en 47.361 euros-. Además, el Gobierno local pretendía modificar el cronograma de las obras debido a que "algunas se fueron complicando y se fueron retrasando los plazos", según confesó el primer teniente de alcalde, Xabier Iglesias.

¿De quién será la responsabilidad de esta pérdida? Este es el asunto que centró ayer el debate del último pleno del año en Cambre.

El portavoz nacionalista lo tiene muy claro. Explicó que el Ejecutivo local elaboró una propuesta de reprogramación porque se han incumplido algunos plazos y destacó que es necesario presentarla "inmediatamente" ante el Ministerio de Política Territorial. "Nuestra responsabilidad es traer la propuesta y hemos cumplido. Ahora es responsabilidad del pleno aprobarla, porque, si es rechazado, se perderá mucho dinero", expuso Iglesias.

Desde las bancadas de la oposición, la realidad se ve muy distinta. "No vengan echando el muerto a la oposición -exigió el edil del PG, Manuel Marante- sean consecuentes con lo que presentaron en un principio, hay que hacer las cosas con seriedad y rigor. Yo no soy responsable de que cambien de idea continuamente". El presidente del PP local, Nicolás Cubeiro, reprobó que el Gobierno local prefiera mantener la Casa da Cultura, "que no ha sido capaz de desarrollar en 20 años", antes que la recuperación del Mero, alegando que hay dudas de viabilidad en este último. "¿No se puede modificar también el proyecto fluvial como el de la Casa da Cultura o es que solo modifican lo que ustedes quieren?", cuestionó.

El portavoz de EU-IU, Luis Taibo Casás, sostiene que se han confirmado sus sospechas sobre la capacidad de gestión del bipartito, ya que no fueron capaces de cumplir los plazos. "Han desvirtuado completamente el Arume aprobado por el pleno y no vamos a ser cómplices de la improvisación del Gobierno", concluyó. "El irresponsable es el Gobierno local por dejar todo para última hora", criticó por su parte la edil no adscrita, Beatriz Ramos.

En la sesión de ayer se produjo una paradoja. La abstención de EU-IU y de Ramos en la propuesta de reforma del proyecto de la Casa de Cultura para rebajar en un tercio su superficie y en más de un millón su coste, permitió que saliera adelante. Sin embargo, sus votos contrarios a la reprogramación del Arume impidieron que se consiguiera el presupuesto necesario. "Si hablamos de responsabilidad, primero deberían haber conseguido la financiación y luego aprobar el proyecto", reprochó Cubeiro al bipartito.

La oposición tampoco concedió al alcalde, Antonio Varela, y al ex edil de Urbanismo Andrés Arcay la indemnización solicitada para pagar las minutas de 34.800 de un bufete de Barcelona que los representó en un juicio penal en el que fueron absueltos. "Respaldamos el derecho a la defensa, pero no que se permitan lujos y que los tenga que pagar la corporación", sostuvo el edil popular Felipe Andreu.