Entre la Virgen del Rosario y María Pita, si tuviera que elegir como día festivo en la ciudad me quedo con la primera. No hay equiparación posible. Por mucho que se trate de encumbrar con ofrendas florales ante su estatua y la llama permanente a la aguerrida defensora, invocando la justicia social y una etérea equiparación de géneros que no sé a cuento de qué viene dicho valor en el homenaje tributado a la heroína, la Virgen del Rosario es foco de identidad coruñesa de por siglos. Deduzco por la reiteración hablando de un acto laico a María Pita, tras la negativa del actual alcalde a asistir a la Función del Voto de la Virgen del Rosario, patrona de esta ciudad, que se quiere destacar el distanciamiento de los actuales munícipes con todo lo religioso, pero ¿seguro que es ese el sentimiento de los ciudadanos coruñeses? Calculo que entre muchos que apoyan a las Mareas, que pueden estar indignados y deseosos de un cambio, y votarles incluso, pero las tradiciones pesan mucho. Ya que gusta tanto lo participativo en el actual Ayuntamiento, sugiero hacer una consulta popular sobre el particular, y veríamos qué sale.