Una semana después de darse a conocer la existencia de un brote de tuberculosis en una guardería municipal de A Coruña, son ya 41 los escolares afectados por la enfermedad. Fuentes de la Consellería de Sanidade informaron ayer de que se han realizado hasta ahora 185 pruebas a alumnos de cuatro centros escolares, de los que 17 han desarrollado la patología y 24 están infectados por el bacilo mycobacterium tuberculosis, causante de la enfermedad.

El departamento que dirige María José Rubio informó la semana pasada de que en la guardería Arela, situada en la segunda fase del polígono de Elviña, nueve niños menores de tres años habían contraído tuberculosis y que otros siete eran portadores del bacilo que la causa, aunque desde la Consellería se hizo un llamamiento a la calma y se aseguró que los niños estaban recibiendo tratamiento contra la dolencia en el hospital Abente y Lago.

La alerta por la enfermedad se había producido ya a principios del mes de marzo cuando una profesora del centro educativo municipal pasó a la situación de baja laboral al serle diagnosticada la dolencia respiratoria. El protocolo para prevenir el contagio se activó a las pocas horas, según aseguró la dirección de la guardería Arela, y comenzaron a hacerse pruebas a los 115 niños matriculados en el centro, además de a los alumnos de otros tres colegios de Educación Primaria de la ciudad.

Desde entonces hasta ayer, se realizaron en los cuatro centros coruñeses pruebas de tuberculina a 185 niños, de los que 17 han desarrollado la enfermedad y están recibiendo tratamiento, pero la Consellería de Sanidade tiene previsto continuar con los controles a los escolares que han podido estar expuestos al contagio.

La Dirección Xeral de Saúde Pública insistió la semana pasada en que el brote está "totalmente controlado", aunque su responsable, Ramón Medina, no descartó que se produjese un "goteo" de casos a partir de entonces debido a que la tuberculosis es una enfermedad que se transmite por el aire y presenta un periodo silente.

De hecho, dos días después de darse a conocer el brote en la guardería Arela, se confirmaron nuevos casos de infectados en el mismo centro, según informó la directora, Berta Corral, quien aseguró que los padres de los menores han estado informados en todo momento de la situación y que no se han recibido quejas.

La calma y la confianza eran de hecho la tónica entre los padres que acudieron a llevar a sus hijos a la guardería al día siguiente de que la Consellería de Sanidade informase del brote de la dolencia, aunque la directora de la escuela lamentó que fuese la propia Administración la que diese los detalles del contagio después de haber solicitado al centro discreción sobre los escolares infectados.