Nada de figuritas o habas de la suerte. Quienes compren el tradicional roscón de Reyes en una pastelería de la localidad leonesa de La Bañeza optan a encontrarse un cheque de mil euros como sorpresa de este postre navideño. El objetivo de este iniciativa -cuyos artífices han bautizado como el roscón anticrisis- es incrementar las ventas de este producto en una época de dificultades económicas.
Ese era el fin y parece que han tenido éxito. El pasado año, cuando la sorpresa consistía en un billete de 500 euros, esta confitería leonesa disparó sus ventas y llegó a distribuir 3.500 roscones por toda España.
Los dueños del establecimiento se animaron a realizar esta original promoción de sus productos hace dos años. Pese a llevar tiempo con la idea de realizar algo semejante no fue hasta la llegada de la crisis cuando estos confiteros se decidieron a llevarla a cabo.
La sorpresa de 1.000 euros no entiende de tamaño ni sabores y por ello, puede estar incluida en cualquiera de los roscones -clásicos o rellenos- que vende este establecimiento leonés.
Para evitar que los billetes pudieran deteriorarse al meterlos en el horno o al partir este postre navideño, la empresa introduce en uno de sus roscones dos vales de 500 euros que el afortunado podrá canjear el 7 de enero por los mil euros reales.
El roscón es el postre típico del día de Reyes y hay referencias sobre su receta o consumo desde hace más de 500 años.
