La dirección del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) ha habilitado camas en el Materno Infantil Teresa Herrera para ingresar a enfermos derivados del servicio de Urgencias ante la mayor afluencia de pacientes de los últimos días. "El lunes se atendieron a 368 pacientes -cuando la media es 320 diarios-y ante esta situación inusual, se ha reforzado la plantilla de Urgencias con más médicos y enfermeros", señalan desde el hospital, donde resaltan que el problema "es la falta de espacio" en este departamento. Algo en lo que coinciden con los trabajadores, quienes a través de la comisión de centro denunciaban ayer "el deterioro" del servicio de Urgencias ante un nuevo colapso, lo que provoca que esta área presente una "calidad asistencial o medidas higiénico-sanitarias, propias de un país tercermundista".

Los trabajadores critican la "falta de previsión" de la gerencia del Chuac y aseguran que, este año, el aumento en la afluencia a Urgencias -debido a la gripe o patologías respiratorias propias de esta época- ha convertido el servicio "en un caos absoluto". "Es imposible realizar una correcta valoración de los pacientes porque el espacio para ello está lleno de gente a la espera de ser atendido: se ha convertido en un almacén de enfermos", denuncia el personal. "La falta de espacio ha provocado que, este año, incluso los pasillos estén llenos de gente", indica Juan Carlos Alonso, miembro de la Junta de Personal del Chuac, quien añade: "No hay ni suficientes camillas para atender a quienes vienen en ambulancia".

Todo ello aumenta la espera de los pacientes que acuden a Urgencias tanto para ser atendidos como para ingresar. "Esta mañana (por ayer) había unos 50 enfermos en sillones, 42 hombres en camillas y una treintena de mujeres en la sala de observaciones", indica Alonso, quien sostiene que, algunos pacientes, "esperan tres días" hasta que queda una cama libre en planta para poder ingresar. En el hospital reconocen que al repunte de pacientes de los últimos días, se une un aumento de "casos complicados, que requieren de ingresos". Ante una situación que califican como "inusual" se han habilitado varias camas en el Materno Infantil Teresa Herrera para acoger a estos pacientes y "el servicio de Urgencias se reforzó con dos facultativos y más personal de enfermería". Algo que ha provocado que, a última hora de la mañana de ayer, solo 23 pacientes aguardasen por una cama, según fuentes del hospital coruñés.

Trabajadores y dirección del centro hospitalario coinciden en que el problema de las Urgencias es la falta de espacio. "La situación no se soluciona con más personal porque es un problema de espacio. La clave está en habilitar otras áreas como camas en el Abente y Lago para repartir a los pacientes y aliviar un poco las Urgencias", indica Alonso. "La situación se solucionará cuando finalicen las obras de ampliación de este servicio. Urgencias pasará de tener 600 metros cuadrados a 2.500", indican desde la dirección del hospital.

La comisión de centro pide a la dirección del hospital que se anticipe a los repuntes de pacientes para evitar futuros colapsos, algo que, aseguran, se repite año tras año.

Más de 500 personas se concentraron ayer frente al Complexo Hospitalario Universitario A Coruña (Chuac) coincidiendo con la aprobación, en el Parlamento gallego, de la ley de medidas temporales para empleados públicos. Con pancartas con lemas contra los recortes como A sanidade galega na UCI, los participantes expresaron su rechazo a una medida que, según la portavoz de la Junta de Personal del área sanitaria de A Coruña, María Seijo, de CIG-Saúde, es "un estocazo" más para la sanidad pública.

Seijo aseguró que en el ámbito sanitario "hay recortes desde hace tres años" y añadió que los contratos "en precario se están ya realizando; ya hay contratos por tres horas a médicos". Además, la presidenta afirmó que a estas medidas hay que sumar otras como "la suspensión de programas como la mejora de Primaria". Seijo resaltó la importancia de que más de 500 personas se concentrasen ayer frente a las puertas del hospital coruñés ya que "mucha gente no estaba porque habían ido a la concentración de Santiago".

Por su parte, Juan Carlos Alonso -miembro de la Junta de Personal- resaltó que no solo están en juego las condiciones laborales de los profesionales sanitarios. "El peligro de estos recortes es que pueden afectar a la calidad asistencial, a la atención a los pacientes", señala y añade: "Se está aprovechando la excusa de la crisis para atacar al sistema público. Se dice que es insostenible, pero es mentira, sí es sostenible".

Esta manifestación se une a la celebrada el pasado día 16, en donde mil sanitarios salieron a la calle en protesta por los recortes. En los próximos días, los sindicatos decidirán el nuevo calendario de movilizaciones.