Dan clase en la universidad por unos 800 euros al mes y con la incertidumbre de no saber cuánto durará su contrato o si en el futuro lograrán la ansiada estabilidad laboral. Son los profesores contratados interinos por sustitución que trabajan a tiempo parcial y que, según denuncian los sindicatos, son los que viven una situación más precaria dentro de los campus. "La mitad de los interinos de la Universidade da Coruña tienen contrato a tiempo parcial y por tanto sueldos inferiores o que rondan los 800 euros, yo les llamo los profesores low cost", denuncia Andrés Marcos, desde CCOO. Pero no son los únicos que imparten docencia sin llegar a mileuristas. A ellos hay que sumar los profesores asociados -unos 200 en la UDC- y con sueldos entre los 400 y los 800 euros. Eso sí, ellos se encuentran en mejor situación que los interinos ya que compaginan su labor en la universidad con otro trabajo en su especialidad.

Los últimos datos sobre profesorado de la UDC -correspondientes al curso 2013- revelan que la entidad contaba con 130 docentes interinos de sustitución, de los que el 49% tendría dedicación parcial. Los sindicatos explican que existen tres tipos de interinos. "Por una parte quienes llegan para cubrir la plaza de una persona que fallece o bien deja su cargo de forma temporal por dedicarse a otra labor; quienes tienen contrato de interino mientras no salen plazas para su puesto como pasa con muchos ayudantes de doctor y finalmente, los que son contratados de forma puntual para cubrir ciertas necesidades docentes", explica el secretario de Universidades de UGT en Galicia, Benjamín Rey.

Todos comparten la inestabilidad que rodea a su trabajo, pero algunos suman a esta incertidumbre un salario que no llega a los mil euros. "Son la categoría de profesores con mayor precariedad porque no saben cuando les va a cesar su contrato. Quienes sustituyen a una persona en concreto saben que su contrato termina cuando este se reincorpore a su puesto y el resto están inestables porque además, el contrato de interino no debe ser superior a dos años", explica Benjamín Rey. "Los interinos a tiempo total cobran como otro profesor, unos 1.800 euros. El problema son los que trabajan a tiempo parcial, con sueldos de 800 euros, que no tienen otro empleo y que encima intentan hacer todos los méritos posibles para cuando surjan plazas", añade Andrés Marcos, quien explica que algunos son contratados "cuando se necesitan docentes para cubrir ciertas horas que con el personal habitual no es suficiente", pero que lo que surge como una necesidad puntual "se prolonga muchas veces en el tiempo".

El principal problema de este colectivo es la inestabilidad laboral que ha aumentado en los últimos años debido a la tasa de reposición fijada por el Gobierno y que sólo permite reponer al 10% de vacantes en el ámbito educativo. Los sindicatos reconocen que la propia universidad está atada de pies y manos para aumentar su plantilla. "La Xunta interviene cada vez más y para contratar a alguien hay que pedir mil permisos", señala Andrés Marcos.

La mayoría de profesores interinos de la UDC, según la estadística del curso 2012-13, son treintañeros (61 de 129) o docentes que superan los 40 (36 casos). Por ámbitos científicos, el grueso de los interinos se encuentra en las enseñanzas técnicas (56 docentes de este tipo) y en las carreras del área de ciencias sociales y jurídicas (51 contratos de este tipo).