"No había competencia durante las pruebas en Londres; las niñas eran todas muy majas"

Algo tímida, pero muy sonriente, la coruñesa Sofía Liñares, de 14 años y alumna del IES Salvador de Madariaga, confiesa estar "muy contenta" por entrar en la Royal Ballet School de Londres „es la única española que se incorporará el próximo curso„ ya que reconoce que siempre quiso dedicarse a la danza de forma profesional. Entre sus sueños, parecerse a Tamara Rojo, Alina Cojocaru o Svetlana Zakharova y "actuar en el Covent Garden de Londres".

Para conseguirlo hace años que trabaja muy duro. "Comencé a ir a ballet cuando estaba a punto de cumplir seis años y siempre me gustó mucho", señala Sofía, quien entrena unas cuatro horas diarias de lunes a viernes y que, debido a su alto nivel, acabará su formación en el Conservatorio Profesional de Danza de A Coruña cuatro años antes de lo habitual. "Acaba este año cuando lo normal es con 17 o 18 años porque en los dos últimos años ha hecho dos cursos por año ya que es muy aventajada", señala su profesor y director del Conservatorio, Luciano Gómez. Más allá de la danza, Sofía reconoce que le encanta ir a la playa en verano y "ver la televisión". Eso sí, su carrera como bailarina le impide tener todo el tiempo que quisiera para ver a sus amigos. Porque al tiempo de ir al instituto y los ensayos hay que unir el de estudiar para sus exámenes de 2º de ESO, donde saca buenas notas.

Sofía recuerda con cariño su viaje a Londres. "No había competencia, con las niñas muy bien, eran muy majas", señala esta joven coruñesa, quien cuenta cómo les recibieron en el centro con "un té y unas galletas" para después hacerles un recorrido por la escuela. Reconoce que solo se puso nerviosa "en el momento justo de entrar a la prueba" y que salió de allí "muy contenta" por cómo lo hizo.