El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad propuso ayer a las comunidades autónomas que ofrezcan una atención sanitaria completa a los inmigrantes irregulares que lleven al menos 6 meses empadronados y se encuentren en "situación de vulnerabilidad o exclusión", y aseguró que el Ministerio del Interior no tendrá acceso a los datos de los ciudadanos que soliciten esta atención y queden registrados en la base de datos del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Así lo anunció el secretario general de Sanidad, Rubén Moreno, tras la reunión de la Comisión de Prestaciones del Consejo Interterritorial del SNS en la que han trasladado a las comunidades una serie de "criterios mínimos" para garantizar la atención social y sanitaria a estos inmigrantes "no registrados ni autorizados como residentes en España y que carezcan de recursos económicos", y que ésta sea "homogénea" en toda España.