La extendida idea de que los setenta años de hoy son como los sesenta de una o dos generación atrás carece de bases, pues aunque las personas viven efectivamente más, esto no implica que su salud es mejor, declaró ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS). "Contrariamente a lo que se supone, hay muy poca evidencia de que que los años adicionales se viven en un estado de salud mejor que el que presentaban generaciones anteriores a la misma edad", afirmó el jefe del Departamento de Envejecimiento y Ciclo de Vida de la OMS, John Beard. El organismo internacional presentó ayer un amplio estudio sobre el envejecimiento, coincidiendo con la Día Internacional de las Personas Mayores.