El alcalde de Sijena (Huesca), Ildefonso Salillas, respira tranquilo desde el regreso, hace ya una semana, de los bienes de su monasterio, pero es consciente de haber hecho frente a grandes dificultades desde hace más de veinte años para conseguirlo, porque, como dice, "Cataluña nunca ha querido devolver a su dueño lo que no es suyo". En una entrevista con Efe, Salillas lamenta la "contaminación política" del litigio debido a la coincidencia de la ejecución de la sentencia que ordenaba la devolución de los bienes con la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña, pero insiste en que la devolución "sólo es un acto de justicia".

"Está claro -subraya- que la justicia tiene sus tiempos, que nosotros no tenemos la culpa ni del procés ni del artículo 155 y que éste es un problema muy enquistado que no se ha querido solucionar durante décadas". Recuerda que los primeros pasos para la recuperación del patrimonio se dieron en 1995.