La metiendioxipirovalerona, coloquialmente conocida como la droga caníbal, es una sustancia bastante fácil de conseguir porque se comercializa en tiendas esotéricas como sales de baño, abonos para plantas o incluso como quitamanchas.

La droga caníbal se puede esnifar, fumar, inyectar por vía venosa o intramuscular, e incluso suministrarse por vía rectal. Está especialmente diseñada para llegar rápidamente al cerebro, con lo que tarda pocos minutos en hacer efecto.

La expansión de esta nueva droga entre la juventud mundial lo demuestra el hecho de que en EEUU las llamadas al laboratorio nacional de toxicología para recabar información clínica sobre esta sustancia pasaron de las 300 realizadas en 2010 a las 6.000 del año posterior. En España el primer caso se registró en Ibiza en verano de 2017 cuando un joven británico atacó a varias enfermeras que le estaban atendiendo y fue preciso la presencia de la policía para reducir al paciente.