El pescador gallego Javier Temprano Quiza, de 26 años, natural de Camariñas, que a primera hora de ayer fue arrastrado por una ola cuando estaba acompañado por otra persona en la zona de Los Charcones, en el municipio de Yaiza, fue encontrado sin vida, sobre las 16.30 horas, por los buzos de la Guardia Civil y agentes de Emergencias de Lanzarote.
Tras sacarlo del agua, el cadáver del joven gallego fue trasladado hasta el puerto deportivo Marina Rubicón, en Playa Blanca (Yaiza), donde la autoridad judicial permitió el levantamiento del cuerpo y su conducción hasta la Clínica Forense, donde se le hará la autopsia.
El hallazgo se produjo en las inmediaciones del lugar en el que se precipitó al mar y a una profundidad de entre "10 y 20 metros", aseguró el gerente del Consorcio de Emergencias, Enrique Espinosa. Junto al cuerpo, explicó, "se encontraba una piqueta, probablemente, para el marisqueo de lapas".
El trágico incidente ocurrió sobre las 09.10 horas cuando Javier estaba en el litoral comprendido entre una potabilizadora y un hotel abandonado. Un golpe de mar lo arrastró. El compañero que se encontraba con él pescando fue el que dio la voz de alarma tras comprobar que Javier no regresaba a tierra.
Tras la llamada de alerta al 112, se desplegó un amplio dispositivo para tratar de encontrar al desaparecido. La primera inmersión de los tres buceadores, desplazados a la isla por el suceso, se produjo en torno a las dos de la tarde, pero el fallecido no fue localizado hasta dos horas y media después. Otros dos submarinistas del Consorcio de Seguridad y Emergencias, así como otros dos voluntarios, se lanzaron al agua junto a los Geas.
Además de los submarinistas del Geas, también intervinieron un helicóptero de Salvamento del Gobierno de Canarias, la patrullera de la Guardia Civil y agentes de Salvamento Marítimo, de Protección Civil y de la Policía Local de Yaiza.
El estado de la mar, "no era especialmente malo este jueves en la zona de Los Charcones", indicó Espinosa, un lugar que es frecuentado por residentes y turistas que buscan un espacio tranquilo alejado del bullicio de playas más turísticas.
Los Charcones son piscinas naturales de aguas cristalinas que se forman en la roca, con acceso a pie.
