El alcalde pedáneo de la localidad albaceteña de El Salobral, Ángel Sánchez, confía en que "poco a poco" el pueblo recobre la "normalidad" después de los sucesos ocurridos desde el pasado sábado, con el doble crimen -el de la niña de 13 años Almudena M. M. y el de Agustín Delicado, de 40- y el suicidio del autor de los hechos, Juan Carlos Alfaro, El Fraguel.

Una patrulla de la Guardia Civil vigilaba ayer con discreción el pueblo para controlar la "psicosis de la gente", explicó el alcalde pedáneo, que tiene la esperanza de que El Salobral, de unos 1.500 habitantes, vuelva a recobrar la normalidad y de que no haya enfrentamientos entre las familias de las víctimas y la de Alfaro, ya que todas son "pacíficas".

Ángel Sánchez pidió calma y aseguró que "son familias normales que están dolidas y es comprensible que puedan decir cosas que, en un momento dado, no quieran decir".

Tras dos jornadas convulsas en la pedanía, El Salobral amaneció ayer "más tranquila" después de que El Fraguel muriera en la tarde del lunes tras dispararse un tiro en la cabeza con una pistola. Juan Carlos Alfaro se quitó la vida delante de varios agentes de la Guardia Civil, que negociaban su entrega tras salir del escondite en el que había permanecido las últimas horas, una nave de una finca familiar situada a las afueras de El Salobral.

Más de 200 familiares y vecinos despidieron ayer "en un ambiente tranquilo y triste" a Juan Carlos Alfaro. Así lo aseguró Ángel Sánchez, quien asistió al funeral celebrado en la sala general de duelos, junto al tanatorio municipal, donde el cuerpo de Alfaro será incinerado. En declaraciones a los medios en el tanatorio, Sánchez confirmó que "por expreso deseo de la familia" el cuerpo iba a ser incinerado. "Ahora la gente está triste, con miedo, con respeto, intentando superar esto, que es complicado", señaló Sánchez.

Para el alcalde pedáneo, a pesar del "duro" episodio que han vivido los vecinos de El Salobral, "hay que intentar digerirlo y guardar respeto". En su opinión, "hace falta sensatez y mucha cordialidad para llevar todo lo más pronto posible a los cauces de la normalidad".

Los órganos del presunto autor de dos de las muertes violentas de El Salobral (Albacete) no han sido donados para ser trasplantados, según confirmaron ayer fuentes de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). Estas fuentes desmintieron "rotundamente" esta donación después de que algunos medios publicasen esa información. Así, desde la organización señalan que el hecho de que tener una tarjeta de donante de órganos y sangre, como era el caso de Juan Carlos Alfaro, no significa que, finalmente, la donación se haga efectiva. De este modo, las mismas fuentes explicaron que "aunque se haya manifestado la voluntad de donar", por diversas circunstancias, "no todo el mundo termina pudiendo donar", como ha sido el caso del asesino de El Salobral.