La Guardia Civil ha detenido a treinta personas, una de ellas en Galicia, pertenecientes a una organización criminal dedicada a la adquisición y venta de armas de fuego por internet en la operación Vulpes III en varias provincias españolas en la que se han desmantelado dos talleres clandestinos.

Los agentes se incautaron de 124 armas de fuego y más de 14.100 cartuchos metálicos, entre otros efectos, informó la Guardia Civil. En los citados talleres clandestinos, en las provincias de Albacete y Vizcaya, transformaban las armas y fabricaban munición y las ventas las realizaban a través de internet.

El delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, manifestó que la persona detenida en Galicia fue puesta en libertad, pero está "pendiente de investigación" para "comprobar" su implicación en la organización criminal.

La operación, coordinada por Europol, ha sido desarrollada por la Jefatura de Información de la Guardia Civil con el apoyo de las secciones de Andalucía y Cataluña y los grupos de Sevilla, Barcelona, Vizcaya, Madrid, Murcia, Granada, Córdoba, Huelva, Jaén, Alicante, Tarragona, Badajoz, A Coruña y Almería. Esta fase de la operación concluye la que se inició el pasado mes de abril cuando la Guardia Civil intervino 23 pistolas y 450 cartuchos y detuvo a una persona en la provincia de Albacete que se dedicaba a adquirir masivamente armas detonadoras en países del Este de Europa. Posteriormente manipulaba las armas para que pudieran efectuar fuego real y disparar munición con proyectiles que él mismo fabricaba en un taller clandestino que tenía instalado en el garaje de su vivienda y realizaba las ventas a través de internet.