La familia de Pilar Garrido, la mujer desaparecida el 2 de julio en México, pedirá una prueba de ADN en España para ratificar que los restos óseos le pertenecen, como dijeron las autoridades mexicanas.

La valenciana desapareció en el estado de Tamaulipas, al noroeste de México, cuando viajaba en coche con su marido y su hijo. Las autoridades mexicanas confirmaron ayer que los restos óseos encontrados el 26 de julio en un paraje cercano al lugar del secuestro corresponden a los de Garrido, de 34 años. Raquel Garrido, hermana de la desaparecida, asegura que en México no les entregaron ningún informe de las pruebas practicadas.

La desaparición de Pilar tuvo lugar en la carretera Soto La Marina, la capital de Tamaulipas, considerado uno de los estados más violentos del país.