El acusado de intentar incendiar su vivienda de Ferrol con butano será juzgado en la Audiencia Provincial de A Coruña. La Fiscalía le imputa un delito de incendio en grado de tentativa, por el que reclama al tribunal que lo condene a siete años y medio de prisión. La acusación pública relata en su informe sobre los hechos que el procesado, sobre las 10.30 horas del 24 de marzo de 2017, cerró todas las ventanas de su piso, colocó una bombona de butano en la cocina, le cortó la manguera de conexión para que saliese el gas, y dejó encendidas en el salón una estufa eléctrica y una vela. Después, abandonó el piso.
"El objetivo era que cuando el gas butano descendiese a ras de suelo y entrase en contacto con los elementos incandescentes, se produjese una explosión en el inmueble", describe la fiscal en su escrito de calificación, en el que indica que el imputado residía de alquiler en el inmueble desde el año 2013.
El procesado, según recalca el Ministerio público, era consciente del "riesgo" que corrían los vecinos del edificio que estaban en el interior de sus viviendas. Una residente en el edificio detectó el fuerte olor a gas y alertó al resto de vecinos, quienes alertaron a los bomberos. Los efectivos evitaron que se produjese la explosión.
El sospechoso fue detenido por la Policía Nacional e ingresó en prisión provisional el 25 de marzo de 2017, al día siguiente de los hechos, tras prestar declaración en el juzgado de guardia.
