Carlos Maldonado pasó de ser un desconocido a un personaje popular tras ganar la tercera edición de MasterChef. Afirma que la televisión "te da una imagen, pero no te convierte en nada" y por eso asegura que él no es cocinero aún. Está en ello, como uno de los alumnos del máster en Cocina del Basque Culinary Center (BCC) de San Sebastián con el que fue premiado tras vencer el concurso televisivo el año pasado.

"El ser buen cocinero se demuestra de otra manera, no con una cara. Por ahora soy cocinero en formación", señala Maldonado en una entrevista con Efe en este centro de la Universidad de Mondragón, donde el 28 de septiembre inició su máster, centrado en la técnica, el producto y la creatividad. Reconoce que la intuición le ayudó a salvar las carencias con las que llegó al programa de TVE, pero que lo que fue una valiosa herramienta para imponerse al resto de concursantes ha pasado a un segundo plano.