La terapia de los hilos y los bolillos

Dice la presidenta fundadora de la asociación de palilleiras de la ciudad, Carmiña Campos, que hacer bolillos es una de las mejores terapias para la depresión que hay; que estar tan concentrado en lo que se hace, que la cabeza no puede pensar en nada más que en poner los alfileres y en mezclar los hilos de la manera correcta. Y es que el encaje es una de las pocas labores en las que es más difícil deshacer que hacer, no basta con tirar de un hilo para dejarlo todo como estaba al principio, hay que repetir los movimientos, pero al revés, y no hay palilleira que se quiera enfrentar a eso si puede solucionarlo con una dosis extra de atención.

A María Isabel Braga, que viene de Vila do Conde (Portugal) le gustaba más estar en la planta baja de Palexco porque sus labores se veían más; ahora está en el primer piso y añora los días en los que todos los que pasaban por delante de su puesto le preguntaban qué estaba haciendo o cuánto tiempo había tardado en hacer esta o aquella labor.

Tres años ni más ni menos invirtió una de las palilleiras en hacer una colcha que está expuesta en el stand de Ciudad Real. No se dedican tanto a la venta de labores como a la difusión de lo que hacen y se sirven de la Mostra Internacional de Palilleiras como plataforma para intercambiar conocimientos. Saben que los tiempos han cambiado y, por eso, aplican la tradición al diseño y a las tendencias. Ana Castro es la única tejedora de telar de bajo lizo que acude a esta reunión, en sus trabajos está presente la historia y las raíces, porque utiliza sedas y linos, pero también la modernidad, con los colores y las combinaciones de materiales.

Están en el piso de arriba de Palexco, al lado de los jóvenes diseñadores, los que intentan hacerse un hueco en los armarios de la gente. Tan solo unas escaleras más abajo, los comerciantes de la ciudad se afanan por rebajar los precios de sus artículos para hacerlos más apetecibles a los compradores potenciales. El Ayuntamiento premió ayer al puesto de la tienda Brétema, por su diseño; al de El rincón de Noa, por su originalidad y al de la óptica Mira para min, por ser el que mejor refleja la relación entre calidad y precio.

Para la jornada de hoy, el Reedit ofrece, a las doce de la mañana, un desfile con la moda que se puede encontrar en los comercios de la ciudad; a las seis de la tarde, habrá otro desfile en el que los modelos pasarán las creaciones de los nuevos diseñadores y, a las ocho y media de la tarde, la escuela municipal de música ofrecerá el concierto de clausura de la primera edición del salón.

Las palilleiras programan para esta última jornada una reunión en la que podrán trabajar, intercambiar trucos y promocionar su asociación.

"Empezamos el curso en octubre y, además, también la recogida de alimentos y de material para la Cocina Económica, con la que colaboramos", explica Carmiña Campos, que cree que hacer bolillos es algo más que tejer puntillas y manteles. Empezó a palillar con siete años cuando ya casi se había perdido la tradición en la ciudad y ahora, asegura, son muchas las personas que quieren recuperarla.