El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha negado este miércoles que el cobro del subsidio por desempleo suponga un desincentivo para el trabajo, ya que cree que en estos momentos no existen ofertas de empleo que los parados puedan rechazar.

El ministro ha respondido a la propuesta de las Cámaras de Comercio que han recomendado revisar el seguro de desempleo para evitar "sus efectos desincentivadores sobre el trabajo" y la "proliferación de conductas fraudulentas" y han apostado por la retirada de la prestación a quienes rechacen ofertas de trabajo.

"Durante la crisis el problema no es que se rechacen ofertas, sino que no hay", ha dicho el ministro antes de su intervención en la jornada organizada por UGT en defensa de los servicios públicos.

Además, Gómez ha recordado que la penalización por desestimar una oferta de empleo adecuada cuando se está cobrando el paro ya está prevista en la legislación laboral.

"No tiene sentido insistir en estas políticas cuando lo que necesitamos es crear más puestos de trabajo", ha añadido.

Respecto a la reclamación de UGT de incluir en la reforma de la Constitución "un suelo" de gasto social, el ministro ha asegurado que se trata de una idea interesante que el PSOE estudiará.

Sobre el reconocimiento mostrado por algunos países e instituciones europeas a las reformas económicas acometidas por España en los últimos meses, Gómez ha hecho hincapié en que se ha tratado de un proceso "conducido, dirigido y afrontado" por el Gobierno sin el apoyo del PP.

"Sólo al final del proceso, cuando la gravedad se ha hecho evidente y la crisis afectaba sobre todo al euro, hemos contado con una cierta comprensión del PP", ha afirmado.