El ministro de Energía, Álvaro Nadal, aseguró ayer que el Gobierno seguirá trabajando por mantener en el actual mix energético tanto la energía nuclear como el carbón y que hará "todo lo que pueda" para que las térmicas que sean eficientes y abaraten el coste de la electricidad sigan abiertas.

Nadal reconoció que con la entrada de más energías renovables en el sistema surge un problema de sobrecapacidad y habrá que cerrar centrales eléctricas, algo que no había ocurrido hasta ahora. En el caso de las centrales de carbón que continuarán abiertas, el ministro incidió en que habrá que mirar "caso por caso" e indicó que, cuando coincida el interés local con el general, como ha ocurrido con las plantas de Lada, en Asturias, y Velilla, en Palencia, que Iberdrola quiere cerrar, el Gobierno defenderá su continuidad.

El responsable de la política energética española insistió en que son dos centrales rentables que, cada vez que han producido, abarataron el coste de la electricidad pues entran con precios más bajos en el mercado mayorista.