España dejó de ingresar 1.966 millones de euros del IVA en 2016, un 3% de los 70.591 millones de euros que finalmente recaudó por este concepto, según un informe realizado por la Comisión Europea. Esta cifra es un punto inferior a lo que se dejó de ingresar en el año 2015, cuando los 2.900 millones de euros que se defraudaron suponían un 4% de los 68.600 millones recaudados.

La institución comunitaria valora los esfuerzos de España para reducir este porcentaje y que, a su juicio, se han visto reflejados en la disminución que ha registrado la brecha fiscal del IVA en los últimos años. Si en el ejercicio 2013, hasta un 12% de lo finalmente recaudado era defraudado, un año más tarde, esta cifra se redujo hasta el 9% y hasta el 4% un año después. Hace cinco años, el sistema tributario español perdía más de 8.000 millones de euros por el fraude en este tributo.

En el conjunto de la UE, se perdieron 147.100 millones de euros, una reducción de 10.500 millones respecto al año 2015, cuando la brecha fiscal suponía un 13,2% del total recaudado.