El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, aseguró ayer que la Administración Trump no tiene intención de frenar sus agresivas políticas comerciales hacia China, y se mostró convencido de que su Gobierno "va a ganar" la guerra comercial desatada entre ambas naciones. Las autoridades chinas cancelaron el pasado sábado las conversaciones comerciales planeadas con Estados Unidos después de que Washington anunciara su última ronda de aranceles por 200.000 millones de dólares.