El Banco de España cesó ayer la emisión de billetes de 500 euros, en aplicación de la decisión adoptada por el Eurosistema en mayo de 2016. El supervisor explica, no obstante, que estos billetes seguirán siendo de curso legal, por lo que podrán seguir circulando y utilizándose como medio de pago y como depósito de valor, es decir para comprar y ahorrar.

Los sectores profesionales, como bancos, compañías de transporte de fondos u oficinas y cambio de moneda, podrán recircular los billetes de 500 euros. Estos billetes mantendrán su valor indefinidamente y podrán cambiarse en los bancos centrales nacionales de la zona del euro en cualquier momento.

La decisión de dejar de producir estos billetes se debe a la "creciente preocupación" en la opinión pública de que están siendo utilizados para actividades delictivas, como corrupción o financiación del terrorismo.