La junta de accionistas de la británica Zegona decide hoy aumentar su capital bruto en, al menos, 100 millones de libras -112 millones de euros-, dinero con el que intentará comprar acciones de la operadora vasca Euskaltel, dueña de la gallega R, en el mercado para hacerse con la mayoría.

En principio, la empresa fundada por Eamonn O'Hare espera la autorización, ya que, ha recibido el apoyo previo tanto de accionistas como de nuevos inversores.

La empresa británica es propietaria actualmente de un 15% de las acciones de Euskaltel. El propósito de Zegona es, con este dinero más dos contratos de préstamo por 33 millones, adquirir otro 12,5% de la compañía vasca mediante compras en el mercado.

Zegona está dispuesta a utilizar, al menos, 124,5 millones de libras -139 millones de euros-, aunque la operación le saldrá más cara que cuando la planeó, ya que la acción de Euskaltel se ha revalorizado tras los rumores de las últimas semanas sobre el interés de Orange en la operadora vasca. Ayer, las acciones cotizaron en la bolsa a 7,95 euros, un euro más que el cierre del pasado 31 de diciembre.

Zegona precisó hace una semana que todavía no ha comprado acciones adicionales de Euskaltel. Si la junta de este jueves lo aprueba y culmina sus planes de compra, sería el primer accionista de la operadora vasca, controlando el 27,5% y superando a Kutxabank, que tiene actualmente el 21,32%.

Precisamente hoy, Euskaltel distribuirá un dividendo a cuenta de 0,14 euros brutos por acción con cargo a los resultados del ejercicio 2018. El importe total que el operador abonará por este dividendo a cuenta asciende a 25 millones.

Plan de expansión

El pasado 16 de enero, justo después de que Zegona avanzase su propósito de hacerse con el control de Euskaltel, esta avanzó las previsiones de su plan para los próximos tres años, con el que prevé facturar 800 millones y registrar un Ebitda (beneficio antes de impuestos y amortizaciones) de 400 millones en 2022, cifra esta última que supone un 30,3% más que en 2017.

El plan de negocio prevé mantener estable su base de clientes en sus mercados tradicionales, Euskadi, Galicia -donde opera como R- y Asturias, durante los próximos ejercicios. La estrategia plantea la entrada en 2019 en cinco nuevos mercados autonómicos: Navarra, Castilla y León, Cantabria, La Rioja y Cataluña, lo que, según sus previsiones, implicará la llegada en estos territorios a más de un millón de nuevos hogares.

La operadora activará la marca gallega R para las comunidades de Cantabria y Castilla y León, donde prevé llegar a 200.000 hogares. En Navarra y La Rioja utilizará su propia enseña mientras que en Cataluña operará con la recién creada RACCtel+.

Asimismo, Euskaltel, que emplea a 700 personas y genera 4.200 puestos de trabajo indirectos, está inmersa en un plan de eficiencia que le permitirá un ahorro de costes de entre 40 y 45 millones anuales. El plan anunciado en enero también contempla el regreso al crecimiento en el B2B (segmento empresarial).

En julio de 2015, la gallega R pasó a manos de Euskaltel. Entonces Abanca, heredera de una porción del 30% del capital que llegó a ser mayoritaria en la etapa de Caixanova, impulsora del proyecto, se embolsó una importante plusvalía. La operación alcanzó los 1.155 millones de euros abonados en acciones y otra parte en metálico. La operadora vasca se hizo también con la asturiana Telecable y hoy se presenta como "la mayor plataforma independiente de cable de España".