El Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra decidió ayer de forma unánime mantener los tipos de interés en el 0,75%, mientras que también votó a favor de no introducir variaciones en sus medidas no convencionales de estímulo monetario a la expectativa de cómo evolucionen las negociaciones sobre la retirada del Reino Unido de la UE.

Según la institución, las perspectivas económicas "seguirán dependiendo en gran medida de la naturaleza y del momento de la retirada de la UE". Apuntó además que los asuntos más relevantes serán los nuevos acuerdos comerciales con la UE tras el Brexit.