La ministra de Economía en funciones rechaza "caer en el alarmismo" ante los vientos de cambio en la economía. España, según Nadia Calviño, seguirá creciendo, aunque a menor ritmo, mientras no llegue "una perturbación impredecible". No niega que el freno exista y admitió que la economía española está muy abierta y no será inmune a las tensiones comerciales globales.