Trabajadores de R Cable y de sus subcontratas denunciaron la falta de "un compromiso en firme" por parte de la Xunta para evitar la deslocalización de servicios por parte de la empresa. Tras las movilizaciones convocadas en los últimos meses, entre ellas una manifestación en A Coruña este martes, los afectados explican que el miércoles mantuvieron una reunión en la Consellería de Industria.
Del contenido del encuentro, los representantes de los empleados del operador gallego de cable y de sus empresas auxiliares afirman que su sensación "es que no hay un compromiso en firme para intentar que la situación vaya por otro camino".
"Sus tiempos no van con los nuestros y parece que miran para otro lado", indican fuentes sindicales sobre el posicionamiento del Gobierno autonómico tras sus denuncias, desde agosto, por la deslocalización de servicios del Euskaltel, grupo al que pertenece la gallega R.
"Salimos de la reunión sin compromiso ni fecha para volvernos a ver sindicatos, trabajadores, Xunta y Euskaltel, y de producirse, es muy probable que ya sea demasiado tarde", advierten los representantes de los trabajadores.
El comité de empresa de la cablera gallega estima que peligran 200 empleos directos y más de 1.000 indirectos en la comarca de A Coruña, donde R ha sido un importante foco de empleo hasta ahora. Los empleados ven con preocupación la política del grupo Euskaltel desde que el fondo de inversión inglés Zegona tomó el control.
Zegona Communications se hizo fuerte en el consejo de administración del grupo vasco de telecomunicaciones Euskaltel el pasado mes de julio tras asumir una representación equivalente a un tercio del consejo. La junta de accionistas aprobó ampliar el consejo con un puesto más y ratificó a José Miguel García (una incorporación promovida por Zegona) como consejero delegado.
