La ministra para la Transición Ecológica en funciones, Teresa Ribera, acusó ayer a la energética Endesa de presentar unas cuentas "trucadas" en As Pontes. "Tal y como la conocemos probablemente tenga un recorrido relativamente corto", manifestó la ministra socialista sobre el futuro de la central térmica de carbón.

Ribera culpó a la compañía de "tomar a la gente por tonta" con sus cálculos. "Para nadie eran una sorpresa los plazos de 2020 y de limitaciones de gases de efecto invernadero y de los precios de CO2, yo me creo las cuentas de Endesa que dicen que es rentable en esos parámetros, y yo me encuentro en junio de 2018 que no había nada, la negación de la realidad, se iba a los pueblos a decir que no se preocupe, que vamos a resistir como una aldea gala; es una irresponsabilidad, tomar a la gente por tonta, un poco de respeto", afirmó la titular de Transición Ecológica en la Ser. La empresa, por su parte, rehusó responder a estas declaraciones.

La ministra cargó contra la energética por proyectar la viabilidad de una central térmica abocada al cierre. "Lo que ha comunicado la empresa es muy serio, que habían hecho los cálculos de su rentabilidad y de su viabilidad en base a unos precios de CO2 que sabían que no se iban a materializar, porque la UE ya había publicado una modificación de su sistema de comercios de emisión que aseguraba que se iba a mover entre 25 y 30 euros la tonelada, desde el 1 de enero de 2019, y ellos hicieron un cálculo de rentabilidad que fijaba el precio de CO2 en el entorno de 5 y 7 euros hasta prácticamente el entorno de 2013, por tanto, eran unas cuentas trucadas", señaló.

En cuanto a las alternativas, Ribera es partidaria de generar un "foco de atracción" de iniciativas en la comarca. "La biomasa es una solución que a escala es interesante, pero hay que ver el recurso disponible, en su integridad no es viable, en eso estoy de acuerdo con la Xunta, pero también me parece que tenemos que explorar el margen de viabilidad porque eso nos permite crear un foco de atracción para otras iniciativas en la comarca, que eso es lo importante", precisó.

Teresa Ribera acusó al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de actuar con demagogia en la crisis industrial que sufre Galicia, y echó de menos una mayor colaboración por parte de la Administración autonómica, como ocurrió en el cierre de Meirama. "Hasta donde yo conozco el gobierno del señor Feijóo se ha mostrado más colaborador en el caso de Meirama en lugar de combatir negando la realidad", dijo. "Yo al señor Feijóo le he oído decir que él apuesta por las políticas de cambio climático porque le preocupan sus hijos y sus nietos, y decir que hay improvisación denota una falta de respeto total incluido a sus compañeros que fueron los que pecaron de alguna mentirijilla", añadió.

Optimista respecto a Alcoa

Ribera aseguró que el Estatuto del Consumidor Electrointensivo solo está pendiente de la autorización europea para evitar que las medidas incluidas sean consideradas ayudas de Estado. "Lo que nos falta es el visto bueno de la Comisión Europea, de la dirección general de la Competencia, para comprobar que no sean ayudas de Estado indebidas, somos bastante optimistas", comentó sobre esta iniciativa destinada a rebajar el precio de la luz a las industrias de gran consumo.

La ministra se mostró optimista sobre el futuro de la planta de Alcoa en San Cibrao. "Lo que deja de pagar Alcoa, lo pagamos todos, y debe haber un cierto compromiso de inversión en la mejor eficiencia", precisó la ministra. A su juicio, en el caso de Alcoa sí lo hay, además de una buena colaboración con la multinacional del aluminio asentada en la comarca de A Mariña. "Somos bastante optimistas con respecto a esa posibilidad, y a como Alcoa está comprometida con el territorio, con la mejora de procesos innovadores y más competivivos, es una buena alianza que nos permite ver con optimismo el futuro de la planta", señaló sobre la continuidad en San Cibrao.