La Xunta ultima sus alegaciones a la propuesta del Ministerio de Industria para rebajar la luz en el sector fabril (proyecto del Estatuto del Consumidor Electrointensivo) y lo está haciendo tratando de unir fuerzas con otras comunidades y en particular con el Principado de Asturias, también preocupado por la competitividad de grandes empresas debido a los costes energéticos.El presidente del Gobierno asturiano, Adrián Barbón, aseguró ayer que trabaja con el Ejecutivo gallego para que sus alegaciones al estatuto "se parezcan" y buscar "las posiciones más decididas". El socialista atiende así al llamamiento del presidente gallego y candidato del PP a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, que el lunes reclamó un "frente común" con Asturias y Cantabria por las empresas electrointensivas, que sostienen 5.000 empleos en Galicia. Por su parte, la ministra de Industria, la socialista Reyes Maroto, reclamó al PP y al presidente de la Xunta que dejen de "bloquear y mentir" y "hagan política útil" respaldando la aprobación del Estatuto del Consumidor Electrointensivo.