El conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, se reunió ayer con los representantes del sector electrointensivo para consensuar las alegaciones a presentar ante el Gobierno central al nuevo borrador de estatuto. Mañana remata el plazo para presentar las aportaciones de la Xunta. Conde explicó que hay una "unidad clara" en Galicia frente al proyecto presentado públicamente el pasado 10 de febrero por los Ministerios de Industria y Transición Energética. El conselleiro criticó al Ejecutivo de Pedro Sánchez por "utilizar la política energética como un instrumento de discriminación territorial". Al respecto, precisó que en el borrador de estatuto "hay comunidades autónomas que se ven beneficiadas por ese incremento de 119 empresas a más de 600 que pueden entrar en el sistema", entre las que citó al "País Vasco y Cataluña", mientras "dejan fuera a empresas que están situadas" en Galicia. Conde aseguró que las empresas que "más ayuda necesitan reciben menos y se abre a más de 450 empresas que antes no estaban en el sistema de consumidores electrointensivos para que se puedan beneficiar".

A su juicio, el sector electrointensivo cuenta con 5.000 empleos directos en Galicia que están "amenazados". Todo ello, mientras el Ejecutivo autonómico trabaja en un frente común con Asturias y Cantabria en defensa de la viabilidad de las empresas electrointensivas. Sobre las alegaciones de la Xunta, demandó la creación de la figura de hiperelectrointensivas, compensaciones fiscales y descuentos hasta el máximo permitido en el pago de los peajes eléctricos.

El titular de Industria recordó que países como Francia crearon la figura de consumidores hiperelectrointensivos, por lo que emplaza a que haya esta "caracterización" también en España.