El Gobierno español decidió ayer mejorar la protección de todos los trabajadores aislados y/o infectados por el coronavirus. En particular, el Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, aprobó un real decreto-ley por el que, tanto las personas en aislamiento preventivo como quienes se han contagiado del virus se consideran en situación de Incapacidad Temporal asimilada a baja laboral por Accidente de Trabajo. Esto supone que pasarán a percibir desde el día siguiente al de la baja laboral, el 75% de la base reguladora, con cargo a la Administración. De otro modo, la prestación por enfermedad común solo hubiera garantizado a las personas afectadas por el virus una prestacion del 60% entre el día cuarto y el vigésimo de la baja, y del 75% a partir del día 21º en adelante.

Esta decisión es la antelasa del plan de apoyo a la actividad económica y a los trabajadores afectados por la epidemia del coronavirus que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pretende pactar mañana con empresarios y sindicatos. En espera de la reunión del jueves, Sánchez, precisó ayer que se aprobarán medidas "contundentes y meditadas" en cuatro grandes ámbitos: apoyar a las familias de trabajadores facilitando la reducción de jornadas y con ayudas para el cuidado de menores tras el cierre de centros educativos, medidas para garantizar el suministro y la producción de medicamentos y acceso al material sanitario, medidas de flexibilidad laboral para proteger los empleos y que las empresas no tengan que recurrir a despidos y recursos para facilitar liquidez a las pymes y que las "tensiones de liquidez temporal" no se vuelvan "problemas de solvencia".

Planteó procedimientos de flexibilidad laboral para que las empresas puedan hacer frente sin recurrir a los despidos mediante reducción de jornada o ajustes temporales. También aseveró que el Gobierno estará "vigilante" para que nadie haga un uso inadecuado de estas medidas en perjuicio de los derechos laborales. Y se comprometió a poner su empeño en apoyar la liquidez de las pequeñas y medianas empresas. "Pondremos en marcha líneas de crédito y adoptaremos medidas para favorecer el cumplimiento de las obligaciones tributarias mediante aplazamientos y moratorias", explicó. Sánchez, que admitió que habrá "semanas difíciles, duras", aseguró que el Gobierno no permitirá que "tensiones de liquidez temporal se vuelvan problemas de solvencia para las empresas".

El jefe del Ejecutivo añadió que se favorecerá el teletrabajo y que habrá medidas específicas en el ámbito del turismo y el transporte, que son sectores "referentes" en el empleo. Además, el presidente español solicitó ayer en el Consejo Europeo que se flexibilicen las normas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento para poder tomar medidas fiscales para afrontar la crisis del coronavirus y que las instituciones de la UE proporcionen mecanismos para dotar de suficiente liquidez a las pequeñas y medianas empresas (pymes). Así lo anunció ayer en una conferencia de prensa tras participar en una reunión del Consejo Europeo por videoconferencia para abordar la crisis del coronavirus. Además, señaló que en el Consejo se barajaron otras medidas como destinar fondos europeos a afectados que pierdan sus empleos, algo que la Comisión Europea se ha comprometido a estudiar.