Los sindicatos CCOO y UGT exigieron ayer a Acciona que retire el ERE anunciado este 14 de agosto para sus empleados subcontratados por Nissan y han pedido a la automovilística nipona (que alcanzó un acuerdo con sus plantilla directa) y a las administraciones públicas que garanticen el mantenimiento del empleo en la cadena de valor.

CCOO reclama que se cumplan los compromisos "con carácter inmediato" para garantizar el empleo de las empresas proveedoras y subcontratas, y recuerda que Nissan debe garantizar que los plazos de producción mantienen la ocupación de toda la cadena de valor de su planta de la Zona Franca de Barcelona. "No es admisible que Acciona utilice la plantilla para renegociar las condiciones del contrato mercantil con Nissan, poniendo en riesgo a más de 500 trabajadores y trabajadoras", afirmó CCOO, que se reúne mañana para preparar un calendario de movilizaciones.

UGT publicó un mensaje en Twitter criticando la actitud de la empresa: "Entendemos que se está actuando de mala fe. La situación de Nissan no es algo sobrevenido sino que es un conflicto que lleva abierto varios meses".

La dirección de Nissan y los sindicatos llegaron a un acuerdo el pasado 5 de agosto sobre el cierre de las fábricas barcelonesas y el ERE. El acuerdo supone retrasar el cierre de las plantas hasta diciembre de 2021, así como el compromiso de la empresa de no realizar "despidos traumáticos" hasta entonces y buscar futuros inversores para la reindustrialización de las fábricas.

Por otra parte, la planta viguesa de PSA volvió ayer al trabajo al máximo de capacidad con la vista puesta en el virus. El cuarto turno fue el primero en recincorporarse.