Los ministros de Pesca de la Unión Europea (UE) no habían sido capaces de alcanzar un acuerdo para los totales admisibles de capturas (TAC) y cuotas para el próximo 2021 al cierre de esta edición. La cuestión que afecta al Mediterráneo, concretamente en cuanto a los días de pesca y la gestión de especies demersales, enquistó las conversaciones de los Veintisiete, cuyo último plenario se retrasó de las 23.00 horas inicial a la 1 de la madrugada. Una de las últimas peticiones realizadas por la delegación española fue la de solicitar más caballa ante la más que previsible prórroga de las cuotas en los stocks compartidos con Reino Unido y afectados por el Brexit, ya que es en los primeros meses del año cuando más se captura esta especie, hasta un 80% antes de mayo.

Las dificultades por la pandemia del COVID y las negociaciones por la desconexión de Londres dificultaron unas conversaciones que comenzaron con la primera propuesta de compromiso preparado por Alemania en su papel de presidencia de turno de la UE. La propuesta, que contenía mejoras para stocks de importancia para Galicia como el lenguado o la merluza de aguas ibéricas (zonas VIIIc y IXa), fue rechazada por el ministro de Pesca español, Luis Planas, y su equipo.

Con la rebaja en el tijeretazo, la merluza pasaba de una reducción de casi el 13% a un 10% (7.877 toneladas) y en el caso del lenguado de un 41,5% a un 27% (un total de 628 toneladas). La conselleira do Mar, Rosa Quintana, también rechazó la propuesta, al considerarla “totalmente negativa” y un avance “escaso”.

Tras desestimar el documento, los Veintisiete iniciaron las reuniones entre cada uno de ellos con la Comisión Europea y la presidencia alemana, así como encuentros bilaterales para tratar de desatascar la situación. Según fuentes diplomáticas citadas por la agencia Europa Press, España se reunió con Países Bajos, Dinamarca, Irlanda y Francia, además de entrevistarse una vez con Bruselas y Berlín. Tras ello, no se espera una nueva —y definitiva— propuesta “antes de medianoche”, pero las últimas informaciones consultadas por LA OPINIÓN apuntaban a la 1 de la madrugada.

Con respecto al Mediterráneo (occidental), el texto de la mañana seguía contemplando una reducción del esfuerzo pesquero del 15%, que obligaría a la flota española a amarrar durante semanas y que se sumaría al recorte del 10% aprobado para 2020. España peleó por “modular” esa disminución, así como por reducir los recortes para aguas de la comunidad gallega y del resto del caladero del Cantábrico Noroeste, ya que además de la merluza o lenguado, Bruselas planteó reducir los cupos de rape (-13%) y rapante (-11%).

Campaña de Navidad

En este contexto, el sector pesquero español se moviliza para fomentar el consumo de pescados y mariscos, a través de los canales tradicionales y de la vía online, para intentar salvar la campaña de Navidad, un periodo que concentra hasta el 25% de las ventas de todo el año. El comité de crisis del sector, formado por la patronal de armadores (Cepesca), la asociación de detallistas (Fedepesca) y la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores (FNCP), insiste también en su petición de reducir el IVA de los productos pesqueros al 4%.

De cara a la inminente campaña navideña, los responsables del sector recuerdan que sigue habiendo tripulaciones sin relevo en terceros países, agradeciendo los esfuerzos de las embajadas y consulados españoles en los países afectados para la gestión de vuelos y permisos que agilicen los reemplazos pendientes.

Además, el sector vuelve a apelar al “sentido común” de los responsables de los gobiernos central y autonómicos para que la estrategia de medidas que establezcan de cara a estas fiestas se “haga con tiempo y sea homogénea” en toda España.