La conselleira de Emprego, María Jesús Lorenzana, informó ayer de que la Xunta ha identificado ocho posibles inversores para comprar la planta de fabricación de aerogeneradores Vestas en Viveiro (Lugo) como los “más viables”. A pesar de esto, Lorenzana apuntó que los actuales responsables de la factoría parecen tener cómo único objetivo cerrar la fábrica e impedir la búsqueda de un posible comprador y, por lo tanto, de un eventual competidor en Europa. En este sentido, la titular de Emprego criticó la “falta de buena fe” de la empresa para facilitar esa operación al realizar solo una ampliación “absurda” del periodo de negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) que deja sin margen de maniobra. La multinacional eólica danesa tiene decidido cerrar su fábrica gallega este mismo año, lo que supone el despido de 115 trabajadores directos.

En declaraciones a la prensa tras una nueva reunión en Santiago de la mesa industrial de Vestas (la tercera), la conselleira lamentó que la empresa haya extendido el periodo de consultas del ERE solo “cuatro días hábiles” —terminará el 5 de noviembre en vez del 28 de octubre—, lo que a su juicio “no deja margen al Gobierno autonómico para la búsqueda de compradores”. La responsable autonómica de empleo considera que esta prolongación de la negociación de ERE se debe solo a una “táctica procesal absoluta” por parte de Vestas, pues supone una “ampliación absurda”. “Cuatro días en un procedimiento de estas características aportan muy poco, por no decir cero”, criticó.

El Gobierno gallego configuró inicialmente a través del una lista de un centenar de empresas nacionales e internacionales como “eventuales interesados” en la fábrica de Chavín, de los cuales quedan ocho potenciales inversores como los “más viables”, en palabras de Lorenzana. Sin embargo, la conselleira ve pocas posibilidades de que la operación se pueda materializar dado que “el tiempo es muy muy ajustado”, pues “la propia empresa reconoció que en periodos parecidos se necesita de meses para llevar a buen fin”. En este sentido, la Xunta reprocha a Vestas su “objetivo” de cerrar la planta de A Mariña, así como de “eliminar cualquier tipo de competidor”, por lo que “no quiere facilitar esa búsqueda de comprador para continuar con empleos y actividad”.

La conselleira de Emprego también cargó contra el Gobierno central y se mostró “decepcionada” por su papel en esta negociación, que a su juicio ha pasado de una postura “proactiva” inicial a “no hacer absolutamente nada” en la búsqueda de comprador. “ “Tenemos serias dudas de que haya un interés real por parte del Ministerio en mantener la actividad de Vestas en Galicia”, llegó a afirmar Lorenzana, que abrió la puerta a que “exista algún tipo de conflicto de intereses que lleve en esas conversaciones fuera de la mesa industrial a apoyar de un modo directo o indirecto la estrategia de Vestas por parte del Ministerio”.

Manifestación

Coincidiendo con la reunión de la mesa industrial, los trabajadores de Vestas se manifestaron ayer por las calles de Santiago para reclamar de buscar alternativas que eviten el cierre de la factoría, que la multinacional quiere llevar a cabo a final de año. La plantilla salió a las once de la Alameda en dirección a la praza do Obradoiro.

El comité de empresa tiene claro que Vestas “quiere matar la producción” de aerogeneradores en Viveiro “sí o sí”, a pesar de que, previsiblemente, la producción de componentes eólicos, que está “aumentando de manera significativa y seguirá aumentando en los próximos años”.

“Queremos una solución para todos y trabajo en A Mariña, y vamos a seguir luchando por esa solución. Vamos a la mesa industrial a renovar ese compromiso con la Administración. La empresa empieza a notar la presión de nuestro trabajo reivindicativo y, por eso, también nos presiona”, concluyó la representación sindical de la planta en un comunicado dirigido a los trabajadores.