Los temores por la nueva variante del COVID-19 detectada en Sudáfrica y la oleada de restricciones en Europa que está desencadenando han llevado al desconcierto a los mercados. El Ibex-35 inició la sesión de este viernes con una caída del 3,8%. A su cierre, la Bolsa española acumulaba una bajada del 4,96%, la mayor caída desde el 11 junio de 2020. En concreto, ha perdido 438,2 puntos hasta los 8.402,7 puntos.

Encabezan las pérdidas IAG, con un descenso del 15,59 %, Amadeus, del 8,92 %; y Aena, del 8,77 %, tres compañías muy sensibles a las limitaciones de viajes; mientras que solo tres valores han terminado en positivo: Siemens Gamesa (3,54 %), Cellnex (1,97 %) y la gallega farmacéutica PharmaMar (1,18 %).

De esta forma, España sigue la senda de la estela de las bolsas asiáticas, donde el inicio de la sesión ha sido en rojo en un contexto en el que la persistencia de la pandemia y la nueva cepa del COVID-19 están deteriorando el sentimiento de los inversores.

Wall Street también abrió ayer en rojo y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, caía un 2% arrastrado por el temor que ha despertado en los mercados la nueva variante de COVID-19 de Sudáfrica de la que informó este jueves la Organización Mundial de la Salud.

Cinco minutos después del inicio de la sesión en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones bajaba 715,15 puntos, hasta los 35.089,23, mientras que el selectivo S&P 500 retrocedía un 1,22%. El índice compuesto del mercado Nasdaq descendía un 0,79%.