Abanca casi dobla su tamaño desde 2017 tras firmar su séptima compra: Targobank

Una empresa puede crecer de forma orgánica a través del incremento natural de su negocio con los recursos que tenga o de forma inorgánica con la fusión o adquisición de otras empresas o combinando ambas estrategias. Esto es lo que ha hecho Abanca desde que en 2013, Banesco, el grupo controlado por el banquero Juan Carlos Escotet, se hiciese con el negocio de la entidad gallega. Su último movimiento —también es la última operación bancaria vivida en España— es la adquisición de Targobank España. A finales de año pasado, Abanca anunció su adquisición y ayer comunicó que había firmado el contrato de compraventa junto al vendedor, Banque Fédérative du Crédit Mutuel, después de que acabase el período de conformidad y la consulta a los representantes de los trabajadores previstos en la legislación francesa.

La estrategia de Abanca de ir comprando pequeños negocios del que se van desprendiendo entidades internacionales le está surtiendo efecto porque en los últimos seis años ha conseguido casi duplicar su volumen de negocio desde los 65.000 millones de 2017 a los más de 112.000 tras la integración de TargoBank.

Con esta última, el grupo liderado por Escotet ha protagonizado siete compras desde 2014, las últimas cinco a una por año en los últimos cinco ejercicios. La primera fue el Banco Etcheverría en 2014. La siguiente, la del Popular Servicios Financieros, se produjo en 2017. Después ya han sido seguidas la integración de la filial portuguesa de Deutsche Bank (2019); la del Banco Caixa Geral en España (2020); Bankoa (2021); Novo Banco (2022) y este año, Targobank.

Con la integración de este último, Abanca gestionará un volumen de negocio de 112.544 millones, un 5,2% por encima del que tenía ahora. Los préstamos ascienden a 49.219 millones, un 6,9% más; los depósitos suman 51.390 millones, con un incremento del 4,4%, y el número de oficinas se sitúa en 727, un 7,5% más. La operación, que se completará a lo largo de este año, según explicó la entidad gallega en un comunicado, queda pendiente de la obtención de las autorizaciones administrativas del Banco Central Europeo, la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia, y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones. Después, durante 2024 se procederá a la integración tecnológica, proceso que la entidad ya ha realizado en las seis operaciones corporativas realizadas desde 2014. Targobank España cuenta con 541 profesionales que prestan servicio a cerca de 150.000 clientes a través de las 51 oficinas que tiene en todo el territorio nacional, sobre todo en el arco mediterráneo, Madrid y Andalucía. Abanca mantendrá a los profesionales de esta entidad.

“La estrategia de negocio de Targobank España coincide con la apuesta de Abanca por la orientación a la captación y vinculación de los particulares, a través de productos de valor como los seguros, medios de pago o fondos de inversión, así como al apoyo a las pequeñas y medianas empresas”, explica Abanca.

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