Enagás impulsa el hidroducto con la Meseta para evitar que Galicia sea “una isla energética”

La Xunta condicionó su bendición al acuerdo con Reganosa a confirmar la inversión necesaria. La compañía confía en que la infraestructura esté operativa en el año 2030

Francisco Conde, Alfonso Rueda y Arturo Gonzalo, ayer, en San Caetano. |   // XOÁN ÁLVAREZ

Francisco Conde, Alfonso Rueda y Arturo Gonzalo, ayer, en San Caetano. | // XOÁN ÁLVAREZ / REDACCIÓN

REDACCIÓN

Enagás ratifica su compromiso con el proyecto del hidroducto entre Guitiriz (Lugo) y Zamora para evitar que Galicia quede como “una isla energética”. El CEO de la principal transportista de gas en España, Arturo Gonzalo, se lo trasladó personalmente ayer al presidente del Ejecutivo gallego, Alfonso Rueda, en una reunión en la sede de la Xunta en San Caetano con la presencia también del vicepresidente primero, Francisco Conde.

La compañía “asume como propio” el proyecto, que había sido impulsado por Reganosa, de la que la administración autonómica es la segunda gran accionista por detrás del grupo Tojeiro. “Asumimos la responsabilidad y el compromiso de seguir tramitando ese proyecto hasta su incorporación a la lista de proyectos de común interés de la Unión Europea”, refrendó Gonzalo.

Enagás y Reganosa, dos tradicionales competidoras, anunciaron esta semana “un histórico acuerdo” por el que el grupo líder del sector adquirirá toda la red de 130 kilómetros de gasoductos de la compañía gallega por un importe de 54 millones de euros, mientras que los dueños de la regasificadora de la comunidad se harán un 25% de la planta asturiana de El Musel por 95 millones. Tras conocerse el pacto, la Xunta condicionó su aplauso definitivo a que Enagás refrendase la inversión necesaria en Galicia.

Eso hizo ayer su CEO. Se comprometió con el Gobierno gallego a hacer “todo lo necesario” para que el proyecto de conexión con la Meseta para dar salida a la producción futura de hidrógeno verde avance e iniciar su construcción a finales del año 2025 o principios de 2026 y, de este modo, que esté operativo en 2030.

Era “fundamental”, valoró Rueda, tener asegurada la interconexión de Galicia con la Red General en España y con el resto de Europa, como se pedía también desde el sector del hidrógeno. “Saben los problemas iniciales de que Galicia se quedara convertida en una isla energética y esto suponía un inconveniente muy grande”, afirmó el presidente del Ejecutivo autonómico, que agradeció a Enagás que “con su potencia y compromiso” asuma este proyecto como “una de sus tareas principales”.

Esta infraestructura se sumará así a los proyectos que Enagás ya tiene en la comunidad puesto que la empresa, recordó el directivo, cuenta con presencia gasista en 374 kilómetros en Galicia con una “red de gasoductos de alta presión”, 21 estaciones y 3 centros de transporte. Ahora, con la incorporación de gasoductos de Reganosa “tendremos una huella de casi 500 kilómetros de gasoeductos” con una “muy alta sinergía”, ha destacado, y plena integración en la red.

El jefe del Ejecutivo autonómico, por su parte, reiteró la relevancia que tendrá esta operación en el futuro industrial de la comunidad gallega y que le da cierta ventaja frente a otros territorios puesto que aquello “por lo que muchos luchan, Galicia ya lo tiene asegurado”.

“Le agradezco que asuma esta como una de sus taras principales” ya que de cara a los retos industriales, en Galicia “no podemos tener mejor acompañante” que Enagás pese a los desencuentros que existieron en el pasado, ha admitido.

La decisión de Enagás, según Rueda, también pone de manifiesto el “trabajo bien hecho” y el “esfuerzo” realizado por el Gobierno gallego para colocar a la comunidad en una buena situación ante el avance de los proyectos que dependen del hidrógeno verde.

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