Calviño contrata a un ‘call center’ ante el aluvión de consultas sobre letras del Tesoro

Los inversores institucionales y particulares se han lanzado a comprar deuda

DAvid Page

Las letras del Tesoro han desatado un atracción desconocida hasta ahora. Con los bancos resistiéndose a mejorar la rentabilidad de sus depósitos y otros productos financieros, los inversores particulares y también institucionales se han lanzado a la compra de deuda pública en busca de intereses más elevados. La fiebre por las letras se ha traducido en un éxito de demanda durante todo el año y ha provocado también una avalancha de consultas y peticiones de información al Tesoro Público por parte de los inversores no profesionales.

Para atender este aluvión de solicitudes de información, el Ministerio de Asuntos Económicos, comandado por la vicepresidenta Nadia Calviño ahora en funciones, ultima la contratación de una empresa privada para encargarse de las labores de atención al inversor del sistema de compraventa de valores del Tesoro Público tanto telefónicamente como por vías online (correo electrónico, whatsapp, videollamadas o chats), para poner en marcha el servicio en noviembre.

La junta de contratación del Ministerio ya propuso en su última reunión la adjudicación del servicio de call center a la compañía Cibernos Consulting, por haber presentado la oferta más competitiva para atender “el elevado número de llamadas y ante el crecimiento exponencial del servicio” de atención al inversor, según se recoge en la documentación oficial de la licitación pública ya en vías de resolverse de manera inminente.

La oferta de Cibernos, cuya adjudicación aún está pendiente de que se formalice, implica la contratación del servicio de call center por un importe de 3,87 millones de euros por un año (incluido IVA), con una opción de prórroga por un año más que previsiblemente se ejecutará y que elevará el coste del contrato hasta casi los 7,75 millones de euros. Los pliegos de prescripciones técnicas elaborados para el concurso público contemplaban un precio anual máximo de 5,31 millones.