Panssari, la ‘startup’ coruñesa-cántabra que hace más seguros los puertos con inteligencia artificial

La tecnología de aprendizaje automático que han creado controla el acceso de personal autorizado, y detecta y realiza un seguimiento de intrusos en recintos portuarios

El coruñés Roberto García, a la derecha, con otro de los fundadores de Panssari, César de la Torre.

El coruñés Roberto García, a la derecha, con otro de los fundadores de Panssari, César de la Torre. / L. O.

Manolo Rodríguez

Manolo Rodríguez

Uno de los grandes problemas al que se enfrentan los puertos es la entrada no autorizada de personas a sus recintos. Y también controlar a las que sí tienen autorización. Para vigilar estos movimientos en las dársenas nació Panssari, una startup coruñesa-cántabra, que tiene como objetivo proporcionar soluciones de seguridad avanzadas en los puertos. Para ello, se han centrado en la investigación y desarrollo de tecnología puntera que controla el acceso, detecta y realiza un seguimiento de intrusos en estos lugares. Uno de los fundadores de la empresa es el coruñés Roberto García Soutullo, director de marketing de la compañía. “Estamos entusiasmados por contribuir al sector de la seguridad portuaria con soluciones tecnológicas de vanguardia. Nuestra meta no es solo fortalecer la protección de los puertos, sino también facilitar la implementación de estas medidas de seguridad en otros sectores como Defensa o el industrial”, explica.

Tres tecnologías

Panssari, apunta Roberto García, se nutre de tres tecnologías que, mediante machine learning, entrenan a la inteligencia artificial con patrones, con lo que se obtienen datos en tiempo real sobre la detección de personas y vehículos.

La primera es el control del acceso a los recintos portuarios. Para ello, han desarrollado un sistema que garantiza la seguridad en la entrada, mediante la aplicación de un sistema de geolocalizado para personal autorizado. Geolocalizan a los trabajadores y visitantes a través de los móviles o de una baliza GPS. De esta forma se puede controlar en tiempo real en qué lugar del recinto se encuentran.

La segunda es la detección de intrusos, que se consigue con la “implementación de soluciones de última generación basadas en la visión artificial y señales de radio frecuencia específicas para la identificación temprana y la notificación inmediata de intrusiones no autorizadas en el área portuaria”. El programa de Panssari se conecta a las cámaras de seguridad del puerto y si, por ejemplo, el intruso está escondido en algún ángulo muerto de la cámara, lo localizan mediante radiofrecuencia.

Y, por último, el seguimiento de intrusos. La tecnología con la que cuentan para este apartado son sistemas inteligentes que permiten una respuesta rápida y eficiente ante cualquier actividad sospechosa.

El primer objetivo de Panssari es desplegar un prototipo en el puerto de Santander. Durante esta fase, la inteligencia artificial será entrenada, aprovechando la potencia del aprendizaje automático para perfeccionar la capacidad del sistema en la detección y respuesta ante posibles amenazas. “Hemos empezado el desarrollo en Santander por ser nuestro puerto facilitador dentro del programa Ports 4.0, pero nuestra intención es crecer y empezar a trabajar con más puertos, comenzando por los nacionales, y entre ellos el de A Coruña”, finaliza Roberto García.

Entre los mejores de 200 proyectos presentados

El año de la pandemia, en 2020, Panssari presentó su proyecto de control de accesos, detección y seguimiento de intrusos mediante inteligencia artificial en áreas portuarias al programa Ports 4.0, que puso en marcha Puertos del Estado y las autoridades portuarias españolas. El objetivo de este programa es atraer, respaldar y facilitar la aplicación del talento y emprendimiento en el sector logístico-portuario español, tanto público como privado. La startup coruñesa-cántabra acaba de convertirse en uno de los 29 proyectos precomerciales seleccionados a nivel nacional para recibir fondos del programa de entre más de 200 presentadas. Fue uno de los proyectos mejor valorados en la categoría de Ideas, con una puntuación de 95 sobre 100. La ayuda recibida es de 380.000 euros con lo que podrán desarrollar el primer prototipo durante los dos próximos años, en los que se incluye unos seis meses para instalar su tecnología en el puerto de Santander. Una vez puesta en marcha podrán acceder a la tercera fase: la de la comercialización de su producto.

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