Energía

El precio de la luz se hunde y marca este domingo 16 horas seguidas a cero euros

El mercado de electricidad se derrumba por los récords de producción de energía eólica por las borrascas y marca su mayor número de horas a precio cero en una década. Luz a cero euros entre la 1.00 y las 18.00 horas.

Un parque eólico.

Un parque eólico.

David Page

Los precios de la luz ahora se hunden y marcan récords a la baja. El mercado mayorista de la electricidad -en el que eléctricas y traders compran y venden la energía que se consumirá al día siguiente- lleva toda la semana marcando precios bajísimos y disparando el número de horas que marca precios de cero euros.

El precio medio diario de la luz del mercado, que sirve de referencia para los más de 8 millones de hogares que tienen tarifa regulada de electricidad, se queda este domingo en 5,03 euros por megavatio hora (MWh), en línea con las cotas registradas a lo largo de toda la semana y por encima de los 1,51 euros por MWh que marcó para este sábado (la menor cota en casi tres años), según los datos provisionales del Operador del Mercado Ibérico de la Electricidad (OMIE).

Pero lo más llamativo es que durante el domingo se acumularán 16 horas seguidas de electricidad a cero euros (desde la 1.00 hasta las 18.00h), el mayor número de horas a cero en casi una década. Y es que no se registraban tantas horas con precio nulo desde el 8 de febrero de 2014, cuando se acumularon un total de 17 horas, según destaca Francisco Valverde, consultor especializado en energía.

Sólo ha habido dos días en la historia de España en que el mercado eléctrico marcó precio cero durante toda la jornada de manera consecutiva, el 29 de marzo y el 1 de abril de 2013, en plena Semana Santa de aquel año. Pero entonces la evolución del mercado mayorista no tenía una incidencia directa en la factura de los consumidores, dado que en esa fecha el precio la electricidad de la tarifa regulada de luz se fijaba mediante unas subastas especiales que se celebraban cada tres meses y marcaban el preci para todo el trimestre.

Más renovables, más barato

El mercado eléctrico, también conocido como pool, fija lo precios mediante un sistema marginalista, que hace que la última y más cara tecnología necesaria para cubrir la demanda marque el precio de todas las demás cada una de las horas del día. Algunas tecnologías de generación denominadas inframarginales (las renovables, la nuclear y la hidroeléctrica) entran en el mercado a precio cero, así que cuando la producción de estas energías es suficiente para cubrir todo el consumo previsto la cotización se queda en esos cero euros.

Eso es lo que ha venido pasando varias horas casi todos los días de esta semana. En lo que va de año se han registrado cero euros en el mercado eléctrico en 85 horas y son cientos de horas en las que se han registrado precios por debajo de un euro. La confluencia de momentos de menor demanda y del cada vez mayor peso de las energías renovables en el mix de producción de electricidad en España están haciendo que se repitan con mayor frecuencia estos episodios. Las horas a precio cero se están concentrando en fines de semana y días festivos por el menor consumo de electricidad.

Durante esta semana las energías renovables han llegado a concentrar a momentos más del 70% de toda la producción de electricidad, coincidiendo también con el parón de varias centrales nucleares. El pool ha estado marcando precios históricamente bajos durante toda la semana gracias al récord de producción de energía eólica por la borrasca Ciarán que ha golpeado gran parte del país y ahora por Domingos, y también por la fuerte aportación de la energía fotovoltaica y de la hidráulica.

Cero euros no es luz gratis

Que el mercado eléctrico se desplome hasta los cero euros no implica que los consumidores tengan luz gratis en su recibo. Por un lado, porque la evolución del mercado mayorista de la electricidad sólo tiene incidencia directa en la factura de los más de 8 millones de clientes que tienen contratada la tarifa regulada, denominada precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC). Por otro, porque el precio de la energía es sólo uno de los componentes que integran la factura de todos los clientes, tanto los que tienen tarifa regulada como la mayoría que ha optado por una tarifa del mercado libre (cuyo precio fijan libremente las compañías eléctricas).

Además del componente de la energía, la factura también incluye impuestos específicos (ahora reducidos o suspendidos temporalmente por el Gobierno como parte del escudo social anticrisis); los cargos regulados, que fija el Gobierno y que sirven para pagar las retribución de las renovables, los sobrecostes de los territorios extrapeninsulares o la deuda del sistema eléctrico; y los peajes de acceso, que establece la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) y que se usan para financiar los costes de las redes de transporte y de distribución. Puede estar a cero la parte del precio de la energía, pero los clientes deben seguir pagando el resto de componentes.

Respiro para 8 millones de hogares

La evolución del precio del mercado mayorista de la electricidad condiciona directamente la factura de los 8,5 millones de hogares que tienen contratada la tarifa regulada de luz, denominada precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC). Al precio del mercado eléctrico se debería sumar el coste de la compensación que se paga a las eléctricas con centrales de gas por el tope de la excepción ibérica, pero como el mecanismo está inactivo desde el pasado febrero (porque el precio del gas está por debajo del tope fijado) el coste de ese ajuste ahora es cero.

El Gobierno ha aprobado una reforma de la tarifa regulada para reducir su volatilidad vinculando la formación de su precio no sólo al mercado diario de electricidad, sino también a otros mercados eléctricos a largo plazo relativamente más estables. Una reforma que entrará en vigor en enero de 2024 y que irá elevando cada año el peso que tiene en el precio final la evolución de los mercados a largo plazo.

El mercado eléctrico marcó durante el año pasado precios récord en plena crisis energética y sufrió una volatilidad extrema agudizada por el impacto económico de la invasión militar de Rusia sobre Ucrania. Durante meses se sucedieron subidas desorbitadas y máximos históricos de cotización, con precios hasta entonces inimaginables por encima de los 500 euros por MWh en el mercado diario y con récords horarios de hasta 700 euros por MWh.