El accidente ocurrido en Pedre (Cerdedo-Cotobade) y las circunstancias en las que se produjo motivaron un gran despliegue de medios en una noche inusual. En plena Nochebuena y mientras toda España disfrutaba de una cena con sus familias, los servicios de emergencias acudían a la llamada recibida desde este lugar, alentados en gran medida por la aparición nada más llegar de dos supervivientes y la posibilidad de que hubiese más esperando por su ayuda.
Según relatan, lo que se encontraron no fue la situación ideal. El viento, las fuertes lluvias, un autobús sumergido en un río desbordado y treinta metros de distancia entre el puente y la zona cero pusieron a prueba la pericia de todos los efectivos desplazados. Destacan que hubo que trabajar con mucha cautela, siendo clave la colaboración entre cuerpos para que todo el engranaje funcionase en una situación tan complicada.
La caída de un autobús al río Lérez deja seis fallecidos y dos supervivientes
Ese esfuerzo terminó finalmente con una sensación extraña. Por un lado destacaban ese gran trabajo realizado y también que terminase dando sus frutos, primero con el rescate de los dos supervivientes y luego encontrando en poco tiempo los cuerpos de los seis fallecidos, algo importante para las familias. Por contra, lamentaron que esa labor no sirviese para salvar alguna de esas vidas.
En ese sentido destacaban la importancia de las dos primeras llamadas recibidas y de la reacción del 112 Galicia, con una movilización muy rápida a pesar de las dificultades que terminó siendo clave para que tanto el conductor como una de las pasajeras terminasen solo con heridas leves. La suya es la historia con final feliz que deja este fatal suceso, una suerte que, ya acabado del operativo, todavía sorprendía a los propios efectivos. “Fue un completo milagro que sobrevivieran dos”, reconocen.
Las hipótesis sobre las causas del accidente del bus en el Lérez apuntan al temporal y a un posible exceso de velocidad
En el lugar estuvieron presentes durante las dos jornadas de trabajo Bombeiros do Deza, Emerxencias de A Estrada, Protección Civil de Cotobade, Grupo de Rescate en Altura y Acuático, GEAS de la Garda Civil, Grupo de Apoyo Logístico de la Axencia Galega de Emerxencias (Axega) con puesto de mando avanzado, albergue y anfibio, Urxencias Sanitarias de Galicia-061, Pesca I del Servizo de Gardacostas de Galicia, Servicio Municipal de Protección Civil de Lalín y voluntarios de Protección Civil de Pontevedra.
Entre los medios movilizados estuvo el Grupo de Intervención Psicolóxica en Catástrofes e Emerxencias (Gipce) del Colegio de Psicólogos de Galicia. Ellos fueron los encargados de atender a los familiares que en la jornada de ayer acudían al lugar para reconocer a los fallecidos.
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La buena labor realizada por los servicios de emergencias en este complicado operativo incluso recibió las felicitaciones por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, a través de las redes sociales.
Este trabajo sin embargo todavía no finalizó. En la jornada de hoy tendrá lugar una nueva batida por la zona, para descartar que pueda haber más cuerpos en el río. Además, todavía hay que retirar el autobús bajo el puente. No es una tarea fácil, ya que necesitará colocar dos grúas de gran tonelaje sobre el puente. Se aguarda que pueda realizarse mañana.