La trilogía secuela de Star Wars (Episodios 7 a 9) es sin duda la que más ha dividido a los fans de la franquicia galáctica. Iniciada por J.J. Abrams con El despertar de la Fuerza- -que le pasó el relevo a Rian Johnson (Los últimos Jedi) para finalmente regresar a la saga cerrando la historia con El ascenso de Skywalker- la historia de Rey, Finn y compañía no terminó de conquistar al fandom. Y según el director uno de los grandes problemas fue la falta de planificación inicial.

Desde el principio, el plan inicial de LucasFilm y Disney para la última trilogía de Star Wars era que cada película fuese obra de un director distinto, continuando la historia donde su antecesor la dejó.

Aunque, tras el abandono de Colin Trevorrow, Abrams volvió a la franquicia, muchos fans pensaron que la historia era un poco inconexa y precipitada ya que el cineasta tuvo que completar tanto su trabajo como lidiar con las decisiones narrativas de Johnson que, en algunos aspectos fundamentales, enmendó en su siguiente película.

En una entrevista con Collider por el 10º aniversario de Super 8, Abrams habló de cómo decidir toda una historia desde el primer momento, y planificar con antelación todas las tramas, beneficia al producto completo. Aunque no mencionó expresamente a Star Wars, sin duda de sus palabras se puede extrapolar lo que él considera uno de los grandes errores de la trilogía secuela.

"He estado involucrado en muchos proyectos, la mayoría series, en las que tienes ideas que desde el comienzo sabes dónde irán", dijo Abrams antes de explicar cómo, en el formato televisivo, los elementos y personajes de la historia pueden ir cambiando en función de lo que funciona para la audiencia.

"Siento que lo he aprendido como una lección varias veces. Tienes que planificar las cosas lo mejor que puedas, porque siempre vas a necesitar responder a lo inesperado. Y lo inesperado puede presentarse en todo tipo de formas, así que no hay nada más importante que tener claro a dónde vas", agregó.

A lo que se refiere el cineasta es que, como en el caso de Star Wars que evita mencionar, la historia fue evolucionando conforme los fans respondían, mientras que el abandono de Trevorrow desbarató los planes iniciales.

Pero lo importante es que desde el primer momento no había unas líneas generales para las grandes tramas, todo se fue escribiendo sobre la marcha, dando lugar a las inconexiones narrativas que tanto han señalado los fans.

"Hay proyectos en los que he trabajado en los que teníamos algunas ideas, pero no las habíamos madurado lo suficiente, y otros en los que teníamos ideas, pero luego no se nos permitió hacerlas de la manera que queríamos. A veces cuando funciona es porque lo planeaste, y otras no funciona porque no tenías un plan", sentenció Abrams.