Como todos los medios andan muy ocupados con el combate Obama vs Romney del próximo martes, de cuyo resultado, por razones de diferencia horaria, no nos enteraremos hasta bien metidos en el miércoles, vamos a dejar las elecciones presidenciales americanas para mejor ocasión, en la seguridad de que, a toro pasado, no meteremos la pata.
Hablaremos de Roma, donde ya cumple condena Pauletto, el mayordomo del Papa, tras un juicio rápido rematado en benévola sentencia como no podía ser de otra manera pues Su Santidad es un bendito no solo de nombre. Abonándole el tiempo ya pasado en la cárcel vaticana y el arresto domiciliario, el criado pontificio pronto estará en la calle (nunca mejor dicho pues irá al paro), y el perdón del Sumo Pontífice, por lo que atañe al resto de la pena, no tardará en llegar, Navidad es buena fecha. Creemos que es interesante señalar que el tribunal acordase no tener en cuenta las conclusiones de la comisión presidida por el cardenal español monseñor Herranz, seguro que en ellas habría datos interesantes, de los que no interesa su publicación. Nadie se cree que el cirio montado fuese obra exclusiva de un fámulo y un informático. Del dictamen de la comisión podría salir un excelente guión para un Padrino IV. Todo se andará, de momento pelillos a la mar y aquí no ha pasado nada, más bien fue cosa de monaguillos y no de monseñores... sabido es que el Vaticano no fue, ni es, ni será campo de intrigas.
Y de Roma a Santiago. Ahora nos enteramos que el organista también había trincado. Solamente un facsímil del Calixtino, pero de 3.000 euros, que no es paja. Se dice que hay más personal catedralicio bajo sospecha. En su día hasta se le intervino el teléfono al deán. De seguir esto así hasta serán investigados los tiraboleiros. Nuestro Metropolitano deberá esmerarse en la selección de personal.
Hay quien dice que todo esto del Códice no es más que un montaje picheleiro con el fin de que no se deje de hablar de Compostela, pues ahora nos encontramos en el período más largo hasta la celebración del próximo Año Santo. Sin embargo el Camino está como nunca, bueno, mejor dicho los caminos, que cada dos por tres se inventan uno. El más reciente el de Hollywood, con los Estévez -el gallego Martin Sheen y familia-, que no son los primeros pues, ya hace años, se les anticipó Sirley McLaine.
