Una docena de los 2.711 bloques diseñados por el arquitecto Peter Eisenman han sido afectados por las pintadas, que incluyen cruces gamadas de hasta 40 centímetros de alto, y fueron descubiertas por el personal de seguridad que custodia el memorial.

El monumento, levantado en memoria a los millones de judíos asesinados por el nazismo, es de libre acceso y está abierto al público las 24 horas del día desde su inauguración, en mayo de 2005.

El vecino monumento en memoria de los homosexuales asesinados durante el Tercer Reich, ubicado a su vez en el área de la céntrica Puerta de Bradeburgo, también sufrió desperfectos en varias ocasiones el pasado otoño.