"Con este calor, se está mejor a la sombra", bromea uno de los copropietarios del Balneario de Arteixo, Máximo Mosquera, para explicar que muchos gallegos se decantan por acudir a las playas en los meses de verano y se olvidan de que las ofertas de los balnearios en la época estival son estupendas, "sobre todo para los que no aguantan mucho al sol".
"No hemos notado aumento ni en julio, ni en lo que va de agosto, podría decir incluso que ha disminuido con respecto a años anteriores", lamenta Mosquera.
En verano, el 50% de los bañistas que acuden a las instalaciones suelen ser de la tercera edad. "Se apuntan por grupos para no venir solos y normalmente son matrimonios, hermanos o simplemente amigos", señala el copropietario del centro , quien añade: "El otro 50% restante es el cliente individual".
El producto estrella del Balneario de Arteixo es el baño de agua termal, demandado prácticamente por el 90% de las personas que solicitan algún servicio, según revela Mosquera.
El agua de termalidad natural minero-medicinal beneficia a las personas que padecen de huesos, patente sobre todo en las personas mayores. "Es una cura inmediata, por eso normalmente repiten y vuelven en menos de un año. Son bastante fieles".
Los turistas, sin embargo, no son los únicos que acuden a este centro en busca de relajación o para curar sus dolencias. Máximo confiesa que muchos vecinos de la zona y personas o incluso familias de pueblos colindantes a Arteixo frecuentan las instalaciones del centro como cura para eliminar el estrés.
