El conocimiento de los buenos hábitos de vida se ha extendido -afortunadamente- a la población general que lee, escucha, consulta, etc... sus problemas sin el pudor de tiempos anteriores. Lo bueno es que la calidad de vida y la salud han mejorado; lo malo es que se asesoren en fuentes inadecuadas que puedan causarles un problema aunque lo hagan sin mala intención. Para consultar problemas de salud, lo recomendable es acudir a un especialista en la cuestión y más aún cuando los síntomas se relacionan con órganos fundamentales como el corazón.

Desde aquí quiero, simplemente, informar de los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares y cómo prevenirlos y recomendar que, si notas "algo raro", acudas al médico y él se encargará de tratarte adecuadamente.

Los principales factores que afectan a nuestro sistema cardiovascular son el tabaquismo, la hipertensión y el mantenimiento de un elevado índice de colesterol en nuestra sangre. También influyen los antecedentes familiares, el sedentarismo, la diabetes, la obesidad, el alcoholismo, etc., todos ellos (salvo la herencia) modificables.

En tus manos está prevenirlos; es sencillo:

- Dejar de fumar ya. Los fumadores siempre encuentran excusas para no dejar el tabaco pero? cada vez tienen menos y aumentan los motivos para dejarlo. Busca ayuda profesional si la necesitas? lo conseguirás, seguro.

- Controlar la tensión arterial. Es imprescindible y muy sencillo. Lo puedes hacer en el ambulatorio, en la farmacia o en tu propia casa con un tensiómetro de precio asequible y fácil manejo.

- Vigilar el colesterol. Debes hacer los análisis que el médico considere oportuno y cumplir a rajatabla sus instrucciones: hacer dieta, tomar fármacos, caminar, hacer deporte, etc.

- Comentar al médico tus antecedentes familiares. Deben formar parte de tu historia clínica y le ayudarán a tomar decisiones relacionadas con tu propia salud.

- Olvidar el sedentarismo. Nuestra vida ya incluye demasiados períodos de inactividad. Busca un hueco para caminar, andar en bicicleta, nadar, etc. Debes hacerlo todos los días, moderadamente y sin esforzarte excesivamente el fin de semana y colgar los tenis el resto del tiempo.

- Medir la glucosa en sangre para evitar la diabetes. Puedes hacerlo con el análisis general prescrito por el médico y, si él lo indica, controlar la concentración diariamente en la farmacia por medio de un análisis rápido. Sigue los consejos del médico relacionados con el control de la dieta, el aumento de ejercicio, el control habitual de glucosa en sangre, etc.

- Perder peso. Debes conocer el peso adecuado a tu altura, medir el contorno del abdomen, etc. No es sólo una cuestión de belleza, es salud. Haz una dieta adecuada, reduce las grasas que consumes, vuelve a las comidas tradicionales, aumenta el consumo de frutas y verduras, etc.

- Dejar el alcohol. Algunos componentes del vino tinto (con moderación) han demostrado que son cardioprotectores pero no puedes beberlo siempre. Disfruta de una copa de vino y, el resto del tiempo, bebe agua.

- Evitar automedicarse. Hay fármacos que adquieren fama (a veces inmerecida) y nos inclinamos por consumirlos. Todos los medicamentos tienen ventajas e inconvenientes por lo que sólo pueden ser prescritos y pautados por el especialista. Lo mismo sucede con los productos "naturales" que no pueden ser consumidos alegremente.

- Vivir tranquilos. Es difícil, pero hemos de plantearnos que no todo es tan grave, urgente, apremiante, imprescindible? como creemos. El estrés mantenido es muy dañino. Coméntaselo a tu médico de familia y el te indicará qué hacer. Si no eres capaz de controlarlo, acude a un psicólogo que te enseñará a manejarlo y buenas técnicas de relajación para desconectar. En casos graves, necesitas acudir al psiquiatra.

Es fundamental hacer una dieta equilibrada, moverse habitualmente, adelgazar si se tiene sobrepeso, controlar los valores sanguíneos y la tensión arterial y dejar los hábitos insalubres aunque sean agradables. Ante cualquier duda, ve al médico, único profesional capacitado para decidir cuál es tu estado de salud y los pasos a seguir para mantenerte bien. Los que ya han padecido alguna patología relacionada con el corazón deben seguir las órdenes de su médico y acudir a urgencias ante cualquier síntoma que pueda aparecer.