Nueve comedores de colegios de Infantil y Primaria de la provincia de Ourense y otros nueve de Lugo -todos ellos de gestión directa y con una media de 25 comensales por centro- corren el riesgo de desaparecer si se aprueba la propuesta de recorte de puestos elaborada por la Consellería de Educación.

Los colegios de áreas rurales y zonas de alta montaña son un indicador clave de la despoblación en las provincias del interior de Galicia, con un progresivo descenso de alumnado. A veces son tan pocos que sostener ciertos servicios públicos, como el comedor escolar, sale demasiado caro o poco rentable a la Administración autonómica. Tanto es así que Educación, en el borrador para modificar las listas de personal laboral de su departamento, propone eliminar 71 puestos en comedores escolares, supresión que dejaría sin este servicio a 18 centros en los que sólo trabaja una persona.

En el borrador de modificación de la Relación de Postos de Traballo enviada a los sindicatos y que será debatida el viernes en un encuentro con representantes de la Administración autonómica, Educación plantea la eliminación de oficiales de segunda de cocina, ayudantes de cocina, limpiadores, camareros y conserjes. De este modo, los centros de zonas rurales en los que el comedor funcionaba hasta el momento con un solo trabajador se quedarían sin personal para servir las comidas.