Los obispos españoles recalcaron ayer que los sacerdotes y religiosos que han abusado de menores deben "responder ante Dios y ante la Justicia", según lo puso de manifiesto el cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), monseñor Antonio María Rouco Varela, en el marco de la sesión inaugural de la XCV Asamblea Plenaria en la Casa de la Iglesia.

El prelado gallego aseguró, en plural, que les "duelen (a los obispos) en el alma los graves pecados y delitos cometidos por algunos hermanos en el sacerdocio y por algunos religiosos que han abusado de menores, traicionando la confianza depositada en ellos por la Iglesia y por la sociedad", y consideró que "deben ciertamente responder de sus actos ante Dios y ante la Justicia humana".

En este sentido, Rouco Varela anunció que los obispos de las diócesis españolas "pondrán más cuidado para prevenir y corregir casos de este tipo, de modo que nadie pueda pensar que sea compatible el servicio sacerdotal o la vida consagrada con la comisión de tales crímenes".En este sentido, Rouco señaló que "es intolerable faltar tan gravemente a la castidad, a la justicia y a la caridad, abusando de una autoridad que debería haber sido puesta precisamente al servicio de esas virtudes y del testimonio del amor de Dios".

Durante el encuentro, los obispos españoles mostraron, todos a una, su apoyo al Papa Benedicto XVI y sostuvieron que no pueden permitir que "estas acusaciones insidiosas sean divulgadas como descalificaciones contra los sacerdotes y religiosos en general y por extensión contra el mismo Papa". En concreto, Rouco Varela reiteró su apoyo al Papa y añadió que le deben a él "las disposiciones encaminadas a prevenir y corregir abusos en el cambio mencionado y en otros ámbitos de la vida de la Iglesia".

"Ya es demasiado que se haya abusado de un solo niño. No puede ser la omisión de las actuaciones disciplinarias debidas o de la atención que merecen quienes han sufrido tales desmanes", reiteró el prelado.

Finalmente, Rouco Varela manifestó que el remedio "hay que buscarlo en medidas preventivas, disciplinares y penales, pero, sobre todo, en el cultivo de la santidad de vida", y concretó: "En la adhesión personal a Jesucristo, por la entrega completa de la propia vida a él en el amor; en la consiguiente libre obediencia a la santa ley de Dios y al magisterio de la Iglesia y en la práctica constante de los medios que hacen posible tal adhesión y obediencia".

El presidente de la Conferencia Episcopal Española tuvo un recuerdo especial para el quinto aniversario del pontificado de Benedicto XVI, que se celebró ayer, y agradeció a Dios, con el posterior aplauso de los obispos, "que haya querido llamar a la Cátedra de Pedro a un hombre entregado al servicio de la Iglesia de un modo tan clarividente y generoso".

Ley del aborto

Rouco Varela criticó, por otra parte, la Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo porque "deja sin protección legal la vida de los que van a nacer y, por tanto, supone un retroceso muy grave hacia el abismo de la cultura de la muerte".

Además, el cardenal gallego lamentó durante su intervención que "pronto se cumplirán cinco años de la nueva regulación del matrimonio en el Código Civil", que, en su opinión, "ha dejado de reconocer y de proteger al matrimonio en su especificidad propia en cuanto consorcio de vida entre un varón y una mujer".