Lo último en el mundo de las videoconsolas pasa por renunciar al mando. Las principales firmas del sector apuestan por juegos en donde basta que el usuario se mueva para poder participar. Gracias a la incorporación de sensores, los jugadores -con sólo moverse- simulan traspasar la pantalla y convertirse en los personajes de la historia. Dos nuevos dispositivos de este tipo -Move y Kinect- se convirtieron en las estrellas de la I Feria del Videojuego, Gamefest, que finalizó esta semana en Madrid. El certamen, en el que se presentaron las últimas novedades del sector, reunió a más de 40.000 aficionados.

La feria -primera de esta magnitud que se celebra en España pese a ser el sexto país a nivel mundial en facturación de videojuegos- nació con el objetivo de que los aficionados conozcan y prueben los nuevos productos antes de que salgan al mercado y con el fin de atraer a nuevos clientes. "Intentamos cambiar un poco la opinión pública sobre los videojuegos porque está un poco estigmatizada. Hay videojuegos de todo tipo, muchos son educativos y se puede aprender con ellos, hacer deporte...", señala la coruñesa Ana Calleja, encargada de la comunicación del Gamefest.

Ella es una de las aficionadas que se ha dejado llevar por la fiebre de los juegos sin mando. "Creo que el Kinect está muy bien ya que hay gente a la que le da pereza jugar porque primero tienen que aprender a utilizar el mando", señala y añade: "Con este sistema se puede abrir el campo de los videojuegos a gente a la que hasta ahora no le habían interesado el sector".

Pero los juegos de baile o movimiento no siempre convencen a todos. "Este tipo de videojuegos no me llama la atención. Me divierten si estoy con más gente pero solo, prefiero jugar sentado y con mando", señala el coruñés Esteban Peleira, un aficionado a las videoconsolas que no dudó en visitar el Gamefest. "Soy muy purista, no me gustan los juegos en 3D ni los videojuegos de ordenador porque me gusta tener el mando en la mano y no jugar con un teclado", añade Sergio Modia, vecino de Sada y presidente de la Asociación de Usuarios de Informática Clásica.

Para unos y para otros, Gamefest cumplió con las expectativas. Los amantes de la videoconsolas de siempre tuvieron la oportunidad de asistir a exposiciones y conferencias sobre los videojuegos de los años 70, 80 y 90. Parte de estas actividades estuvieron organizadas por la asociación de Sergio. "Presentamos materiales que nos ceden las empresas de sobrestock y los vendemos", señala este coleccionista de videoconsolas de otras épocas. "Mi consola favorita es la Supernintendo y mi juego Zelda", confiesa. En el caso de quienes quieren conocer de primera mano lo que el mercado del videojuego traerá en los próximos meses, la I Feria a nivel estatal contó con stands donde los jugadores podían probar videojuegos aún sin comercializar como lo nuevo de Assassin's Creed o Dragon Ball.